Quién pensaba que todo esto sería miel sobre hojuelas, quizás haya pecado de excesiva ingenuidad. Y es que el anunciado matrimonio de Britney Spears ya está teniendo sus momentos polémicos.
Se reportó que el ex esposo de la intérprete de Oops, I did it again, Jason Alexander, irrumpió de sorpresa en el hogar de la artista con el objetivo de detener su compromiso. A través de su cuenta de Instagram, fue el propio Alexander el que transmitió el momento en que personal de seguridad que había en el lugar lo captó. Posteriormente, el sitio TMZ publicó imágenes donde se puede ver cómo lo detuvieron dentro del lugar.
Con todo los ánimos algo nerviosos, finalmente ayer se realizó el esperado matrimonio de la cantante con Sam Asghari. Luego de cinco años de relación, la pareja concretó su compromiso legal con la esperada atención de las redes sociales.
El ícono pop dio el Sí oficial en una íntima boda y su vestido fue un diseño de Versace. A la fiesta acudieron sus más cercanos, entre ellos, Drew Barrymore, Madonna, Paris Hilton y Selena Gomez, entre otros. Por su parte, los medios aseguran que sus hijos no asistieron, pero que estaban muy felices por su madre.
Los novios no tuvieron un “primer baile”, pero la cantante tuvo su momento junto a Drew y Selena.
En cuanto al intruso, aseguró que la misma Britney lo había invitado, algo que se cree bastante improbable. Fue así como comenzó a grabar el momento mientras los guardias intentaban detenerlo y evitar que siguiera avanzando hacia la casa y donde estaba dispuesta la ceremonia.
El sitio TMZ señaló que se llamó a la policía en el lugar, luego de que se reportara a un intruso en el recinto. Cabe recordar que Britney Spears y Jason Alexander tuvieron una tumultuosa relación amorosa, que comienza cuando se casan en Las Vegas en el 2004. El matrimonio duró solo 55 horas y la Princesa del Pop pidió la anulación poco después. Sin embargo, en el último tiempo Alexander seguía hablando de ella y de la batalla legal que la cantante libró por la tuición de su padre.