Más de 25 años han pasado desde que Leonardo DiCaprio y Kate Winslet estelarizaron uno de los dramas más románticos en la historia del cine: Titanic, del director James Cameron. Desde que debutó en los cines la película pasó a ser un éxito rotundo en la taquilla, posicionándose hasta hoy como la tercera con mayor recaudación (2.200 millones de dólares) en la historia de la industria. En 1998, el filme hizo historia al consagrarse como la gran ganadora de los Premios Oscar con 11 trofeos, hasta hoy un récord que ninguna producción ha logrado batir.
El regreso hoy jueves 9 de febrero de Titanic a las salas de cine en una versión remasterizada en 3D HDR y alta velocidad de cuadro, no es la única celebración en el mundo cinematográfico. La producción fue el inicio de la amistad entre dos de los actores más importantes de su generación, Leonardo DiCaprio y Kate Winslet. Una relación, que muchos desearon y especularon que fuera más que una amistad, pero con los años ambos han demostrado que nunca se miraron con otros ojos y el cariño es como si fuesen familia.
En 1996 se cruzaron por primera vez los caminos de DiCaprio y Winslet para darles vida a Jack Dawson y Rose DeWitt Butaker. Dos jóvenes de distintas clases sociales que se enamoran en un viaje por un trasatlántico con un triste final, que hasta hoy da qué hablar. Así lo recuerda y analiza también, James Cameron que hace unos días en el documental de National Geographic, Titanic: 25 Years Later With James Cameron, realizó distintas pruebas para ver si Jack realmente se podía salvar o no de morir congelado.
A pesar de que resulta casi imposible imaginar esta película con otros actores, ninguno de los dos fueron la primera opción del director canadiense. Para interpretar a Jack, la primera opción era Matthew McConaughey. En ese entonces, el actor tenía 28 años y una carrera consolidada de películas románticas. McConaughey audicionó para el papel y cuando ya todos parecían convencidos de que él era el indicado, llegó DiCaprio. Leo, con 22 años, tenía una carrera en la actuación marcada por películas como ¿A quién ama Gilbert Grape?, que le consiguió su primera nominación a los Oscar, y Romeo y Julieta. James Cameron recuerda que el actor llegó a la reunión y pasó algo raro: “Levanté la vista y en la habitación, todas las mujeres del edificio estaban en la reunión. Así que pensé: será mejor que contrate a este tipo”.
Para el protagónico femenino, las candidatas del canadiense eran Uma Thurman o Gwyneth Paltrow. Esto no impidió que Kate Winslet, se diera por vencida y fue en busca de ese papel. En ese tiempo, la actriz ya había sido parte de Criaturas Celestiales y de Sensatez y Sentimientos, adaptación del clásico de Jane Austen que le consiguió su primera nominación al Oscar. Años después Kate contó cómo llegó al protagónico: “Cerré el guion, lloré un mar de lágrimas y me dije: bueno, tengo que conseguirlo”. Animada por su amiga, Emma Thompson, llamó a su representante para conseguirse el número de James Cameron. “Estaba en la autopista y me dijo que iba a no sé dónde. Creo que se arrimó a alguna parte para estacionar y entonces le dije: ‘Ese papel es para mí, y si no me lo das, estás totalmente loco”. Kate realizó pruebas con McConaughey y otra con Billy Zane, y resultó como la escogida para interpretar a Rose
El rodaje de Titanic duró 160 días y comenzó cuando Winslet tenía 20 años. La actriz confesó que durante la grabación de la película se sentía exhausta y así lo confesaba en distintas entrevistas: “Si parezco asustada, helada y agotada en la película durante las escenas de hundimiento es porque realmente estaba asustada, helada y agotada. Después de tres meses, me sentía físicamente hinchada, magullada y sola sin mi familia. Tuve que seguir pensando para mis adentros: Tú querías esto, ahora solo sigue adelante”. Otro de los temas que dio qué hablar en ese entonces fueron las declaraciones de Winslet respecto a Cameron: “tiene un temperamento para no creérselo. Tendrían que pagarme mucho dinero para volver a trabajar con Jim”, dijo al periódico The Guardian.
La actriz no volvió a abordar ese tema hasta que se reencontró con el director para la secuela de Avatar. En plena promoción del exitoso filme, tanto Cameron como Winslet se han mostrado cariñosos y con buenos comentarios para el uno y el otro. “Jim está mucho más tranquilo ahora. No puedo imaginar la presión que vivió en el rodaje de Titanic, con todas aquellas conversaciones en torno a la película. A medida que envejecemos, aprendemos a decir: Cometí un error. Todos mejoramos en eso, ¿no es así?”, dijo Winslet al The Sunday Times.
A diferencia de su relación con Cameron, la amistad entre la actriz y Leonardo DiCaprio fue notoria desde un principio. Una de las primeras escenas que les tocó compartir fue cuando Jack debía plasmar en su cuaderno de dibujos a Rose desnuda. Winslet se desnudó con naturalidad y la línea de DiCaprio debía ser: “Acuéstate sobre el sofá”, pero Leo se equivocó y dijo: “Acuéstate sobre la cama, perdón, sobre el sofá”. Para el director esto mostró de forma exacta lo que se quería transmitir y por lo mismo la dejó en la edición final.
Para James Cameron era importante que los actores improvisaran durante el rodaje. Winslet contó que la escena que comparten en el auto juntos se les ocurrió ese mismo día. “En esa toma, no éramos nosotros. Y, sin embargo, estábamos nosotros metidos en la historia. La Rose que había en mí de algún modo estaba haciendo el amor realmente con el Jack que había en él. Y aunque yo no tuviera esos sentimientos por Leo, era muy hermoso sentir eso en la escena”, dijo la actriz.
DiCaprio en una entrevista con Oprah el 2014 confesó cómo fue compartir con Winslet durante los meses de grabación: “Fue mi mejor amiga durante siete meses. Descargábamos las tensiones del rodaje juntos, nos desahogábamos juntos, estábamos atentos el uno al otro. Ella era la persona ideal para trabajar, porque parecía un muchacho más. Todo habría resultado más duro sin ella. Fuimos muy compañeros. Si no hubiera sido por ella, esa película no habría salido”.
Luego del éxito con Titanic, Winslet y DiCaprio se convirtieron en una de las estrellas más relevantes en la industria. En cada alfombra roja, premios y eventos fueron fotografiados juntos. En más de una instancia cuando le preguntaron a la actriz acerca de los rumores de romance con Leo y respondió: “la mera idea de algo así era demente: habría sido como un incesto”. “La razón de que nuestra relación funcione es porque nunca nos hemos visto dentro de ninguna situación romántica”.
En 2008, los actores volvieron a compartir pantalla en Revolutionary Road, del director y pareja de Winslet en ese entonces, Sam Mendes. A pesar de su tibio recibimiento, la actuación de Winslet le valió un Globo de Oro que dedicó a DiCaprio: “Para uno de los hombres más especiales de mi vida. Leo, estoy tan contenta que no puedo estar aquí y no decirte cuánto te quiero y lo mucho que te he querido en los últimos 14 años.”
DiCaprio aprovechó su participación en el programa de Oprah para felicitarla. “Enhorabuena, Kate, todavía no había tenido la oportunidad de decírtelo en público, has hecho un trabajo increíble, ganaste dos Globos de Oro en una noche y te lo mereces por haber hecho dos trabajos tan extraordinarios. Hemos crecido juntos en esta industria y nos hemos convertido en un imprescindible apoyo el uno para el otro”, dijo el actor al que le costó unos años alcanzar la gloria y un Oscar por su actuación en The Revenant.
La tercera vez que la actriz llegó al altar fue el año 2012 con el empresario Ned Rocknroll. La ceremonia fue privada y contó solamente con los cercanos a la pareja, entre ellos DiCaprio que incluso fue quien la escoltó hasta el altar. En 2014 la actriz declaraba: “Desde el principio hemos podido bromear entre nosotros, y todavía lo hacemos. Somos almas gemelas”.
En una entrevista con The Guardian en 2021, Kate confesó que estuvo casi tres años sin ver a su amigo DiCaprio por la pandemia pero que finalmente se reencontraron en Los Ángeles. “Es mi gran amigo, un amigo íntimo. Estamos unidos de por vida. Durante la filmación de Titanic yo cumplí 21 años y Leo, 22; no fue agradable para ninguno de nosotros, pero, al menos, estábamos juntos”, recordó.