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Emilia Noguera, la hija menor del actor Héctor Noguera, fue una de las invitadas al estelar de CHV, La divina comida, espacio donde se reunió con figuras como la periodista Magdalena Montes, el ex ministro Sebastián Sichel y el actor Fernando Gómez-Rovira.
La también actriz, conversó sobre su carrera artística, y con esto, se refirió a un hecho íntimo que le ha impedido actuar en el mismo set junto a su hermana, la reconocida actriz Amparo Noguera.
En conversación con sus compañeros de velada, reveló la particular razón por la que no puede actuar con la protagonista de icónicas teleseries como “Romané”, “Iorana” o “Vuelve temprano”, entre otras. Eso sí, aclaró de inmediato que no se debe a una rivalidad entre hermanas.
“Nos dan ataques de risa en mala onda”, contó la actriz, aprovechando de revelar una situación que les ocurrió al compartir escena en una producción dramática.
“Ella era mi suegra y yo la tenía que envenenar. O sea, imagínate el ataque de risa de tener que hacerlo en serio. Llegaba con un postre, con cara de mala. Sólo con llegar con el postre envenenado, mirarla a la cara y tratar de actuar… Ninguna posibilidad”, se sinceró Emilia, quien desclasificó que tuvo que grabar dicha escena sin la presencia de Amparo. “Me grabaron a mí, mientras ella no estaba”, dijo.
La actriz de “La poseída”, además contó una anécdota con su padre cuando actuaron juntos por primera vez: “En cuarto año hice mi primera obra que fue La Tempestad. Día del estreno, era mi primera obra, guagua, con él, viejo. Partíamos los dos como atrás de un panelcito”, comenzó relatando. “Yo estaba completamente aterrada y abría la obra. Estaba histérica y me doy vuelta para buscar contención en mi padre”, expresó. Sin embargo, contó que él estaba igual de nervioso: “Él, con cada obra que hace, vuelve a sentir el nervio que sentía yo en mi primera obra profesional”, detalló.
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La también dramaturga y directora de teatro, contó que no lo pasó bien cuando su padre se convirtió en una celebridad. Apenas tenía 15 años cuando Héctor Tito Noguera interpretó al alcalde Federico Valdivieso en Sucupira, y Emilia expresó que esa fama fue “una locura”.
“Hubo como una experiencia de transformación para toda la familia, que fue cuando empezó a grabar esta teleserie. Yo sabía que mi papá era actor, había vivido ciertas situaciones de vergüenza espantosa del tipo que mi papá llegue de Rey Lear a buscarme al colegio, con la barba hasta acá. O llegaba con el pelo teñido por Theo y Vicente, donde interpretaba a Van Gogh. Entonces llegaba con el pelo teñido en una época en que los hombres no se teñían el pelo”, narró.
Además, contó que en su casa su mamá no ponía teleseries, esto para evitar preguntas como ‘¿El papá por qué le está dando un beso a otra señora?’.
Otro suceso que describió como “crítico”, fue en unas vacaciones cuando “de repente llegamos a Chillán, alguien cachó que estábamos en el auto y la gente se empezó a subir arriba del auto”. Agregando que, en esa misma ocasión, fueron a un restaurante al que siempre iban y que su dueña tuvo que cerrar para que pudiesen comer tranquilos.
Actualmente Emilia se encuentra próxima a volver a la pantalla chica, con su actuación en La torre de Mabel, producción dirigida por Cristián Mason y que se emitirá por Canal 13.
