Tanto el príncipe William como Harry son reconocidos por sus obras benéficas y participación en diferentes instituciones. Ambos han confesado que es algo que los apasiona. Es un rasgo heredado de su madre, Lady Di, y de las pocas cosas que su título royal les permite hacer fuera del protocolo. Ahora que el menor de los hermanos no es miembro senior de la realeza, habrá cambiado su dirección de correo, pero no su alma caritativa.
Sin embargo, aún habiendo participado en diferentes causas benéficas, errar es humano, y el príncipe Harry cometió algunos errores en su pasado que reflejan una evidente ignorancia de clase. Algo que él ha confesado recientemente. En 2005 su foto vestido de nazi daba vuelta al mundo y desató un escándalo que terminó con disculpas oficiales por parte del joven de 20 años. “Lo siento mucho si he causado alguna ofensa o vergüenza a alguien. Fue una mala elección de disfraz y me disculpo“, decía el comunicado.
Un error que no cometió por maldad, sino más bien por ignorancia de clase. Algo que acaba de reconocer en una conversación con el activista Patrick Hutchinson para la edición británica de la revista GQ. “Según lo veo ahora mismo, fue mi educación y el tipo de vida que tuve desde siempre lo que me ha hecho ignorar temas como los prejuicios raciales. No tenía ni idea de que eso existiera”, confesó.
Su relación con Meghan Markle guarda directa relación con este cambio y aprendizaje. Y él mismo asume que ahora ve problemas que antes no veía, como los prejuicios raciales. “Por eso, y es muy triste tener que decir esto, me ha llevado años y años darme cuenta de ese problema. Especialmente después de vivir un día o una semana en los zapatos de mi mujer“, reveló durante la entrevista, refiriéndose no solo al tema del racismo, sino también al acoso de la prensa británica que sufrieron el último año.
Sin embargo, el príncipe fue muy enfático en que no puede culpar a nadie por su falta de conocimiento al respecto. Pero ahora que nota su existencia, su responsabilidad, asegura, es salir de su zona de confort y educarse sobre ello. “Porque ahí es cuando la ignorancia deja de ser una excusa”.
Ahora que vive en Estados Unidos se ve enfrentado a otra realidad, de la cual dice aprender todos los días. “Por eso para mí es muy interesante vivir este proceso ahora que vivo en Estados Unidos. Porque esto no va de negros contra blancos. A las protestas raciales de 2020 acuden personas de toda raza, sexo, edad y religión. Es un movimiento global. El tren ya ha partido de la estación, y si no estás subido a él, más te vale hacerlo porque queda mucho por hacer al respecto”, explicó.
Además, considera que estos prejuicios no pueden perpetuar en el tiempo y que, en su rol de padre, trabajar por un mundo mejor es su principal propósito. “No puedes perpetuar estos prejuicios raciales. Especialmente si eres una persona con poder político y mediático. Por eso desde que me convertí en padre, mi principal objetivo a día de hoy en la vida, es intentar dejar un mejor mundo para que viva mi hijo”, concluyó.