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Luego de unas tranquilas vacaciones de invierno, el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis retornan a clases. Los dos mayores en St. Thomas’s Battersea, la escuela privada. Mientras que Louis asiste a la escuela de párvulos Willcocks.
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Si te imaginabas que la vida escolar de los tres niños era distinta solo por pertenecer a la familia real, estabas equivocado. Son estudiantes regulares, y con el esfuerzo de Kate y William, se han desarrollado en un ambiente apropiado y lo más libre de presión posible.
Incluso, el ex director de Thomas’s Battersea señaló en una oportunidad a los periodistas que cuando se trataba de los bisnietos de la reina Isabel, «no habría ningún trato especial en absoluto».
Eso se ha visto traducido en que ni George, Charlotte o Louis, mantienen sus títulos en la escuela. Y si bien el apellido de la familia real es técnicamente Mountbatten-Windsor, los niños usan el apellido Cambridge, por los duques.
El príncipe George, de 8 años se encuentra cursando cuarto año. Y sus clases van desde las básicas como matemáticas, inglés, historia y geografía, hasta cursos impartidos por profesores especialistas en materias como francés, estudios religiosos, informática, arte/diseño, teatro, música e incluso ballet.
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Por otro lado, su hermana Charlotte de 6 años, comenzó segundo año, donde aprendió las mismas materias que su hermano mayor, y extras como música y ballet. Fuentes han revelado que es fanática del baile, y disfruta de el gracias a una gran sala de ballet con un pianista en vivo que tiene su escuela.
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Por último, el pequeño Louis, que tiene 3 años, asiste al Willcocks Nursery School. Ahí, ha podido aprender cocina, poesía, banda, canto, naturaleza, rompecabezas, actuación, entre otros aspectos básicos.
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