A fines de junio el príncipe Carlos se vio involucrado en una polémica tras recibir un maleta con un millón de euros en efectivo, y ahora nuevamente se ve envuelto en el mismo drama, esta vez por una millonaria donación de la familia de Osama bin Laden.
Según el Sunday Times, Carlos recibió en 2013 una donación benéfica de 1,2 millones de dólares de Bakr bin Laden y Shafiq bin Laden, los hermanastros de Osama bin Laden, tras una reunión en Clarence House ese mismo año.
Según el mismo medio, el hijo de la Reina Isabel II habría aceptado la donación al Fondo Benéfico del Príncipe de Gales (PWCF), fundada por Carlos en 1979, a pesar de las objeciones de asesores clave.
Desde Clarence House refutaron esa afirmación, diciendo en un comunicado: «El PWCF nos ha asegurado que se llevó a cabo la debida diligencia para aceptar esta donación. La decisión de aceptarla fue tomada únicamente por los fideicomisarios de la organización benéfica y cualquier intento de caracterizarla de otro modo es falso».
A pesar de que el apellido bin Laden cuenta con una carga negativa, en 1994, la familia de Osama renegó públicamente de él, y no hay indicios de que sus hermanastros tuvieran vínculos con sus actividades o relación directa con el terrorismo.
Sir Ian Cheshire, presidente de la Fundación Benéfica Príncipe de Gales, señaló a People que «se llevó a cabo la debida diligencia, con la búsqueda de información de una amplia gama de fuentes, incluyendo el gobierno. La decisión de aceptar la donación fue tomada íntegramente por los fideicomisarios. Cualquier intento de sugerir lo contrario es engañoso e inexacto».