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La comedia es sin lugar a dudas el género clave en la carrera de Steve Carrell, pero de vez en cuando el actor protagoniza títulos como El Paciente que confirman su gran talento dramático. Algo que ya había demostrado en películas como Foxcatcher y en la premiada serie The Morning Show, donde compartió protagonismo con Jennifer Aniston y Reese Whiterspoon. Hoy reafirma esa versatilidad en una serie de tipo policial psicológico que está dando mucho que hablar.
Con lo que el público de este rincón del planeta puede conmoverse y sorprenderse con una historia que mezcla el drama con el thriller y tiene como sus personajes centrales a un psiquiatra y su paciente. Un destacado profesional y autor llamado Alan Strauss, encarnado con sutileza y altura por Carrell, que hace poco perdió a su esposa a causa de un cáncer y que mantiene una tensa relación con su hijo. Sin embargo, continúa enfocado en las terapias en su consulta en casa y acaba de aceptar como paciente a un joven que le dejó un mensaje en su teléfono y se presentó como Gene Bollinger.
Pero este realmente se llama Sam Fortner (Domhnall Gleeson), un hombre que desencadena la peor experiencia en la vida de Strauss, luego de que, como se ve en la escena inicial, lo lleva como rehén a su casa. Lugar donde lo tiene encadenado y lo obliga a seguir tratándolo como paciente, con la esperanza de que logre terminar con el violento instinto que lo convirtió en un asesino serial, rasgo que se habría desencadenado en su infancia, cuando su padre lo golpeaba ante la mirada impotente de su madre Candace, con quien aún vive tras divorciarse y lo apoya en el secuestro del psiquiatra para que lo ayude a resolver su problema psiquiátrico.
Al mismo tiempo que Alan trata de que Sam no elimine a quien conoció en su trabajo como inspector de restaurantes y que convirtió en el foco principal de su psicopatía, además de lidiar con sus propios temores y conflictos, donde a través de flashbacks vemos las desavenencias con su hijo Ezra, quien se alejó un tanto de la familia luego de hacerse judío ortodoxo, que en su subconsciente expone a su fallecido mentor. Lo que se va dibujando en un interesante relato que por momentos pierde un tanto de fuerza por lo lento de su desarrollo, pero suple sus falencias gracias a las sólidas actuaciones de Carrell y Gleeson.
El Paciente cuenta con 10 capítulos de, aproximadamente, 30 minutos cada uno y ya se puede ver a través de la plataforma de streaming Star Plus.
