En Afganistán, con el regreso de los talibanes, gran parte del mundo, ha centrado su preocupación en el destino de las mujeres y las niñas de ese país. En este contexto, se han recordado libros y películas en torno a su situación; uno es Las niñas clandestinas de Kabul, de la periodista sueca Jenny Nordberg; un texto desgarrador que cuenta el drama de las niñas Bacha Posh en Afganistán.
Bacha Posh, significa vestida como niño; y su nombre se refiere a un tercer tipo de menor de edad en Afganistán. De esa manera, para salir adelante, muchas niñas afganas sólo tienen la opción de lucir como no son para poder sobrevivir.
En Las niñas clandestinas de Afganistán, Jenny Nordberg, da a conocer historias reales de mujeres que crecieron o viven como Bacha Posh; también está el libro I am a Bacha Posh (2014), de Ukmina Manoori, Stéphanie Lebrun y otros.
Con la llegada de los talibanes, las imágenes de las mujeres ya han salido de la vía pública y se han dado restricciones que parecen insólitas para este tiempo (como sonreír).
Además, es muy probable que por el estilo de los talibanes lo que se viene para las mujeres y niñas afganas puede ser, incluso, peor a llevar burka. Represalias, violaciones, mutilaciones, imposibilidades de estudio y tanto más son parte del miedo legítimo de quienes se preocupan por ellas.
La película Osama
Otro de los proyectos relacionados a las niña Bacha Posh, es Osama, una película de dirigida por Siddiq Barmak, y protagonizada por la actriz afgana Marina Golbahari, cuando tenía diez años. En 2004, Osama ganó el Globo de Oro a Mejor Película Extranjera; también fue premiada en Cannes con una mención especial. Esta cinta mostraba cómo una niña se vestía de niño para poder salir a la calle.
Su protagonista, Marina Golbahari, quien tuvo que salir de Afganistán, ya que al ser actriz es considerada una infiel. Hoy, junto a su marido, vive asilada en París y ha sido amenazada de muerte.