Tras la muerte de Isabel II, la reina consorte Camilla ha heredado su rol de patrona de Barnardo’s, una organización benéfica fundada en 1866 para ayudar a los niños en situaciones de vulnerabilidad. La mujer del Rey Carlos III se estrenó ayer en este cargo con una curiosa donación.
La casa real británica ha decidido donar a los niños de la organización, los mil ejemplares de ositos Paddington que los ciudadanos dejaron a las puertas del palacio de Buckingham y el castillo de Windsor en memoria de Isabel II. “Los ositos han sido lavados para que presenten el mejor aspecto posible antes de ser enviados a su nuevo hogar”, dice la casa real a través de un comunicado. “De momento se está cuidando de ellos en el palacio de Buckingham, en Clarence House y en la guardería de Royal Parks en Hyde Park”.
Según la casa real británica, la fotografía de la reina Camilla con algunos de los ositos que acompaña al anuncio de esta donación fue tomada este jueves pasado, día en el que se cumplían 64 años de la publicación del primer libro del oso Paddington, uno de los personajes más queridos y famosos de Reino Unido. Aunque el oso Paddington es casi tan longevo como lo fue el reinado de Isabel II, se le empezó a asociar con la antigua monarca este año, después de que Isabel II apareciera sentada a la mesa junto con él en un divertido vídeo emitido con motivo de su Jubileo de Platino. Por eso, cuando murió la reina muchos británicos llevaron ositos Paddington además de ramos de flores a sus residencias.
“Los corgis no se lo van a tomar demasiado bien. El oso Paddington les ha arrebatado el primer puesto en el podium”, bromeó el príncipe William al ver los peluches.