Un estudio reciente afirma que entrenar menos puede resultar igual de eficiente que hacerlo todo los días, pero debe cumplirse una condición.
Si bien para muchos el deporte es parte de la rutina, para otros es algo poco entretenido y, por lo mismo, cuesta comprometerse. Sin embargo, una nueva investigación publicada en el Journal of the American Heart Association asegura que el ejercicio menos frecuente puede ser tan eficaz como los entrenamientos diarios. Eso sí, con una condición.
Para la investigación se analizaron las estadísticas de 93,000 personas de una base de datos biomédicos del Reino Unido. Y descubrieron que hacer deporte sólo uno o dos días a la semana, también llamados “weekend warriors”, sí aporta beneficios. Pero tienen que ser de moderado a intenso y sumar 150 minutos.
La conclusión del estudio, finalmente, es que lo importante es la cantidad total de ejercicio que realizas, no cuándo los haces. “No es necesario hacer ejercicio todos los días para mantenerse sano. Mientras se realicen 150 minutos de actividad física moderada o intensa a la semana, ya sea en uno o dos días o de forma dispersa, se puede reducir significativamente el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular, cáncer u otras causas”, afirma el doctor Zhi-Hao Li, autor del estudio y epidemiólogo de la Universidad Médica del Sur de Guangzhou.
Son 150 minutos de actividad física aeróbica de intensidad m0derada a la semana, esto es, que aumente el ritmo cardíaco y la respiración. Pueden ser sesiones de bicicleta de 75 minutos el fin de semana, un paseo tranquilo o una excursión, incluso jardinería o incluso bailar una noche de fiesta.
Por su parte, 75 minutos de actividad física aeróbica de fuerte intensidad significa que te haga respirar fuerte y rápido. Esto es, salir a correr, un HIIT o entrenamiento exigente de fuerza.