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Este jueves se estrenará, por fin, ese espectáculo de entretención sin frenos ni pausas como es Top Gun: Maverick. La secuela, aún mejor que la original, que está estelarizada por el incansable Tom Cruise, donde además está Val Kilmer, pero donde se extraña la ausencia del motivo romántico de aquella primera versión: la actriz Kelly McGillis.
Y si bien no es solo McGillis la gran ausente acá, sino que también Meg Ryan, quien personificaba a la pareja del mejor amigo de Pete “Maverick” Mitchell, el protagonista de esta historia, lo cierto que McGillis en su rol de Charlotte “Charlie” Blackwood, era la pareja del personaje de Tom Cruise. Pero lo cierto es que Kelly no aparece en este retorno porque nadie de la producción de Top Gun: Maverick siquiera la llamó para ningún tipo de participación, tampoco como parte de la actividad promocional de la película.
“No ha sucedido. Además, si ocurriera, tendría que evaluar dónde estoy, qué estoy haciendo, qué está pasando. No puedo proyectar lo que haré o no haré en el futuro. No tengo idea porque no sé dónde estaré”, dijo la actriz para el programa Entertainment Tonight en 2019 cuando esta secuela ya era un plan cierto, pero que aun no iniciaba su filmación.
“Estoy vieja y gorda y aparento la edad que tengo, y eso no es de lo que va esto. Prefiero mucho más sentirme segura en mi propia piel y en quién soy que dar valor a todas esas cosas”. Por otro lado, Kelly McGillis señaló que prefiere mantenerse alejada de Hollywood, lugar del que decidió autoexiliarse desde hace décadas. “Fue muy desafiante para mí tener algún tipo de identidad propia o autovaloración real que no fuera lo que hice para vivir”, dijo acerca de su paso por la industria cinematográfica.
“Simplemente, no se convirtió en una prioridad. Lo que se convirtió en prioridad inicialmente fue criar a mis hijas y ser la mejor madre que podía ser”, contó la actriz cuyo caso sobre todo en estos días previos al estreno de Top Gun: Maverick ha tomado especial fuerza en redes sociales, donde cibernautas han manifestado su molestia ante la eventual discriminación de la producción del filme con la actriz, dejándola de lado no obstante Tom Cruise mantiene su lugar inamovible.
En 2014, Kelly McGillis fue diagnosticada con el trastorno alfa-1 antitripsina, el cual aumenta las posibilidades de sufrir enfermedades de hígado y pulmón. Por otra parte el director de esta nueva Top Gun, Joseph Kisinski, dijo en entrevista que no se consideró a Kelly McGillis ni a Meg Ryan porque se iba a contar una historia diferente: “esas no eran historias que estábamos lanzando”.
