Como un espejo oscuro que nunca deja de reflejar nuestras peores ansiedades digitales, Black Mirror regresó a Netflix con su séptima temporada. Seis nuevos episodios exploran, con la ironía y el dramatismo que caracterizan a la serie creada por Charlie Brooker, las múltiples formas en que la tecnología trastoca nuestras relaciones, identidades y memorias.
La temporada abre con un matrimonio que a la vista, parece perfecto. Pero cuando Amanda cae en coma a causa de un tumor cerebral, Mike recurre a un tratamiento experimental llamado Rivermind. Y lo que promete ser una cura milagrosa, se convierte en el inicio de un laberinto ético y emocional.
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Maria lidera con éxito el departamento de sabores de Ditta, hasta que su excompañera de colegio, Verity, se une a la empresa. A partir de ese momento, todo se desmorona. Tareas fallidas, reputación en juego y una paranoia creciente que convierte su vida laboral en un thriller psicológico.
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Una empresa revive un clásico del cine usando una tecnología llamada ReDream, que permite a una actriz, Brandy, insertarse literalmente dentro del metraje. Lo que comienza como una reinterpretación artística se transforma en una historia de amor inesperada entre Brandy y Clara, uno de los personajes del film original.
Pero no todo sale según lo planeado. La tecnología falla, el guión se deshace y el episodio toma un giro metaficcional en el que la realidad se confunde con la narrativa.
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Ubicado en el universo de Bandersnatch, este capítulo se abre con la detención de Cameron Walker, sospechoso de un crimen. A medida que los interrogatorios avanzan, se desvela una conexión con Thronglets, un nuevo videojuego de Colin Ritman que parece tener más de un as bajo la manga.
Tras la muerte de Carol Hartman, su antiguo amor, Phillip, es invitado por la empresa Eulogy a colaborar en un memorial inmersivo. A través de una guía digital, recorre sus recuerdos mediante fotografías que puede explorar físicamente.
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El primer sequel de la historia de Black Mirror recupera a la tripulación digital de USS Callister (temporada 4), ahora liberada y en busca de su lugar en el vasto universo del videojuego Infinity. Nuevos peligros, aliados inesperados y una narrativa vibrante hacen de este episodio una verdadera superproducción.
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