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Este martes, el cantante Raphael, de 81 años se encontraba grabando un especial de Navidad del programa “La Revuelta”, cuando comenzó a sentirse muy mal, así que fue trasladado al Hospital Clínico San Carlos de Madrid por un aparente episodio cerebrovascular.
Un día antes el intérprete de “Mi gran noche” y “Como yo te amo” estuvo en el programa de Antena3, “El Hormiguero”, para hablar de sus próximos conciertos de este viernes 20 sábado 21 de diciembre en el Wizink Center de Madrid. Los conciertos de Navidad ya fueron cancelados por indicación médica.
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En el estelar recién mencionado, también habló de su salud. “Yo estoy bien, me he cuidado. Solo una vez que no me cuidé y menudo viaje me pegó la vida. Antes de lo que me ocurrió y de tener que ser trasplantado, no me cuidaba. Hace 22 años me dieron una segunda oportunidad y desde entonces me cuido muchísimo”, explicó horas antes Raphael.
Hubo días de misterio sobre su estado de salud, pero ya entregaron el primer parte médico y es bastante positivo. “Transcurridas las primeras horas y tras la realización del estudio neurológico urgente, se ha descartado el ictus como causa de su ingreso hospitalario”, se lee en el documento.
Luego explican lo siguiente: “Será necesaria la realización de más pruebas para determinar el origen del proceso neurológico que presenta. Por voluntad del paciente y de su familia se trasladará al Hospital Universitario 12 de Octubre, dados sus antecedentes de trasplante al que fue sometido en el citado centro y para el seguimiento médico continuado que realizará en dicho hospital”.
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Debemos recordar que hace 22 años, Raphael tuvo un transplante de hígado y el proceso quirúrgico fue de vida o muerte. “Desde entonces, el artista no solo logró recuperarse, sino que también se convirtió en un firme defensor del sistema de donación de órganos en España”, destacó “Infobae”.
También sabemos que el artista está “bien” según explicaron sus representantes. El artista, que ha estado acompañado de sus hijos, se encuentra consciente y le han realizado varias pruebas médicas.
“Jacobo y Manuel Martos fueron los primeros en llegar al hospital para interesarse por el estado de salud de su padre. Ninguno de los dos podía ocultar su nerviosismo y preocupación“, informó revista “Hola”. Luego su hija, Alejandra Martos, reveló que “duró muy poco. Al poco tiempo ya hablaba con la facilidad de siempre”.
Su agencia de representación además envió un mensaje del español: “Agradece profundamente el interés y las innumerables muestras de apoyo recibidas desde todos los rincones del mundo”.
