Amelia Freer es una de las principales terapeutas nutricionales del Reino Unido y su foco principal es la “nutrición positiva”. ¿En qué consiste? muy simple. Nutrir cuerpo, mente y alma a través del placer de alimentarse con una dieta equilibrada.
Si mantener la línea para muchos ya era un tema previo a la pandemia, este 2020 fue algo más difícil. Freer está consciente de la influencia de nuestras emociones en la alimentación y, por lo mismo, confirma la importancia de crear nuevos hábitos alimenticios saludables.
Aquí te dejamos las 5 claves de la experta para lograr una dieta equilibrada y saludable, sin tener que pasar horas en la cocina.
1. Aumenta los alimentos sin procesar
Es por definición el cambio más importante y que de seguro marcará la diferencia según la experta. Aumentar la cantidad de alimentos naturales ricos en nutrientes que consumes, como frutas y verduras, proteínas de buena calidad, grasas saludables, frutos secos, semillas y el agua.
2. Piena en el equilibrio
La regla de oro básica de Freer es que organizar una comida sabrosa significa incluir todos los grupos importantes de alimentos, para proporcionarle al cuerpo los diversos nutrientes que necesitamos.
Empezar con verduras o frutas, después una buena fuente de proteínas (carne, pescado, huevo, yogurt natural, legumbres, frutos secos o semillas) y algunas grasas saludables (aceite de oliva o palta). Si tienes hambre o has hecho ejercicio, incluye algunos carbohidratos poco procesados (como papas nuevas o alimentos integrales como el arroz integral o la avena). Y para el toque de sabor, láminas de chili, ralladura y zumo de limón, pimienta negra u otras especias.
3. Comemos por salud emocional y física
La comida es uno de los placeres sencillos más importantes de nuestras vidas, y es clave a la hora de comer sano. Por lo mismo, la terapeuta nutricional asegura que una parte importante de este proceso es encontrar una dieta sana que seguir de forma constante, y en la que disfrutamos comiendo y cocinando.
“La vida es demasiado corta para sentirnos limitadas o que tenemos que luchar con uñas y dientes para comer a diario. Hallar este placer requiere un poco de experimentación y ganas de jugar, probar nuevos ingredientes y nuevas maneras de cocinar y de comer hasta que encontramos lo que mejor nos funciona”, comentó a Vogue UK.
4. No siempre se trata de la comida
Comer está ligado prácticamente a todos los aspectos de nuestras vidas y de nuestra salud, ya sea el trabajo, la familia o el descanso y la actividad. Así que a veces necesitamos concentrarnos en estos aspectos primero para poder llevar mejor nuestra nutrición. Por lo mismo, hay que evitar enfocarnos solo en la comida.
5. Sostenibilidad y productos de temporada
Nuestra salud está relacionada con la salud del planeta, los sistemas alimenticios y el estado de la tierra. Y las decisiones que tomamos como consumidores impactan en el medio ambiente. Ser conscientes nos ayuda a tomar decisiones conscientes. Y para eso, comprar productos de temporada es un factor de cambio. Además, así variamos nuestra dieta a lo largo del año.
