¿Dónde se quiere sentar? Es una clásica pregunta al llegar a un restaurante y, en estos días de verano, la típica respuesta es “¡En la terraza, por favor!”. A fin de cuentas, desde la primavera al otoño para muchos es el mejor lugar para juntarse en un ambiente más suelto y entretenido. Incluso en épocas más frías es el favorito de muchos, sobre todo de los que todavía fuman, ya que las estufas de pie se hacen más amigables y si se le suma una manta, como lo empezaron a realizar hace varios años en ciudades como Londres o Berlín, es mil veces mejor.

En las casas, obviamente, pasa lo mismo.

Los nuevos departamentos, por su parte, también han sacado provecho de estas, sobre todo en los últimos pisos, en lo que algunos le dicen el ”Penthouse”, pasando a ser los más valiosos y requeridos de cualquier proyecto. Es como tener una casa con jardín y piscina, pero en la alturas y con la seguridad de un departamento.

A nivel general, las inmobiliarias han sabido darle más valor a las terrazas del resto de los departamentos de los edificios. Algunos ya vienen con parrillas incorporadas y con la flexibilidad de poder conectarlas al living gracias a ventanas correderas plegables, que hacen que se genere un gran espacio, transformando los lugares de interiores a exteriores en segundos.

Además, quien pensaría que hace unos años se despreciaban las cubiertas de los edificios o de los centros comerciales, así como también las veredas y calles de Santiago. Hoy son un must y un gancho para atraer clientes. Un caso emblemático de la buena opción de salir al aire libre es la Avenida Isidora Goyenechea. Por la pandemia y los aforos, la Municipalidad de Las Condes le dio permiso a los restaurantes para que se tomaran las veredas y, en algunas partes, hasta la calle misma. Estos nuevos lugares son los más ricos, dejamos los recintos cerrados para estar más afuera, cosa que ya había logrado el famoso Tiramisú con su mesas al aire libre.

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En el caso de los malls esto también se da, ya que aprovecharon las cubiertas que estaban destinadas a los equipos de aire acondicionado. Un ejemplo es El Mirador del Alto, en el Alto las Condes, y hoy el recién inaugurado Roof de Casacostanera es un must, con exquisitos restaurantes y una increíble decoración, como Casa Miraolas, ambientado por el Estudio Domínguez Goycolea o el Fukasawa, espacio concebido por el arquitecto Marcial Cortés-Monroy y la decoradora Paula Délano.

Así que, por fin, ¡no más encierro! Queremos estar al aire libre, ver los atardeceres y mirar a la gente pasar. Es una buena idea para que también lo consideren en oficinas y más departamentos o centros comerciales. Ya tenemos suficiente encierro en nuestro día a día y más que nunca queremos –y necesitamos– vida al aire libre.