En el más reciente capítulo de Viaje a lo insólito, Claudia Conserva reveló que, en medio de su lucha contra el cáncer de mama, decidió recurrir a una alternativa poco convencional: ser “operada” por monjes brasileños.
Los llamados monjes tupyaras, según explicó, son médicos fallecidos que, antes de dejar este mundo, eligieron dedicar sus energías a ayudar a otros a sanar, actuando desde otra dimensión.
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“Cuando tienes un diagnóstico con un pronóstico tan malo, y sabes que lo único que te puede salvar es la quimioterapia, estás abierta a cualquier cosa. Lo peor que me podía pasar era morir igual“, confesó Conserva.
Todo comenzó con un correo que le anunció que sería visitada por estos sanadores en su propio hogar. “Entonces, un amigo brasileño me avisa que me va a llegar un mail de estos monjes, porque me iban a operar. Pensé que era alguien vivo que se contactaba contigo“.
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La dinámica con los monjes tupyaras es única. Estos “doctores espirituales” no cobran por sus intervenciones. Solo piden una dirección y un horario, además de la fe del paciente.
Claudia decidió confiar plenamente en Ceferino, el médico fallecido que, según le indicaron, sería el encargado de visitarla. “Lo imprimí y lo pegué en mi lámpara, al lado de mi velador, para conocerlo y mirarlo, para que cuando me operara, ya nos conociéramos“.
La animadora detalló que las “visitas” no solo la ayudaron en el aspecto físico, sino también en lo emocional. “Para mí era un panorama juntarme con él (…) Iba, me acostaba, entonces empecé a conocerlo más”.
“Me contactó con gente, me trajo de sorpresa a mi papá muerto, mi tía, y seguía trabajando en esta zona que le había indicado. Era muy feliz juntándome con este señor“, concluyó Conserva.
