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Su paso por esta vida fue corto. Demasiado, si se tiene en cuenta su intensidad y el aporte que hizo a través de un talento tan exquisito, como genial. En un momento en que todos estamos sensibles, la noticia de la muerte del gran chef peruano Ciro Watanabe (39) sorprendió al mundo gastronómico; especialmente el chileno-peruano. Desde quienes trabajaron y aprendieron de él, pasando por los periodistas y críticos con que tantas veces compartió, a quienes de una u otra forma disfrutaron de su talento, al probar algunas de sus creaciones Nikkei (comida peruana-japonesa) o verlo en distintos programas y entrevistas.
En medio de esta triste noticia, se emitió el siguiente comunicado: “Con hondo pesar, la familia de Ciro Watanabe Muñoz, comunica su lamentable fallecimiento; durante la madrugada de hoy, en Lima Perú, como consecuencia de una enfermedad crónica. Durante su trayectoria, Ciro Watanabe Muñoz fue condecorado en repetidas oportunidades en Chile y el mundo por su contribución al desarrollo de la gastronomía Nikkei y sus aportes a la gastronomía chilena. Su familia agradece la preocupación de los medios de comunicación. Sus funerales se realizarán en Lima Perú, privadamente”.
Muchas han sido las condolencias que se han dado en las redes sociales. El presidente del Círculo de Cronistas Gastronómicos y del Vino de Chile, Patricio Rojas, posteó: “Chef @cirowatababe tu fuego apasionado por la cocina continuará inspirando a los que siguen y a los que vienen”.
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El crítico Daniel Greve inició este sábado con una foto en blanco y negro, donde decía: “Y TE FUISTE, gordo querido. No sabes lo que cuesta escribir esto, pero lo necesario que es para aceptar tu partida…”.
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Mientras que Cimagen Comunicaciones, que trabajó estrechamente con Watanabe, lo recordó desde esa energía que lo hacía tan reconocible; y por la que le entregó tanto en la unión de Chile con Perú, a través de la gastronomía.
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A Chile, Ciro Watanabe llegó el año 2009, para hacerse cargo del restaurante Osaka (Nikkei), que en ese tiempo estaba en el Hotel W. Con un prestigio innegable, fue considerado uno de los mejores de Latinoamérica en distintas oportunidades. El restaurante después se instaló en el Hotel Noi.
Por motivos personales, Watanabe estaba en su tierra natal, trabajando. A fines de enero, se dio la visita de un grupo de fiscalizadores de la Seremi de Salud al Osaka. Desde Perú, la cadena –que tiene varios espacios en América Latina– iba a mandar a un equipo experto para ver qué había ocurrido, pero finalmente decidió retirar la marca Osaka Nikkei de Chile.
¿Un sabor más que amargo? Por supuesto. Sobre todo tras amanecer este sábado con una noticia que duele a sus seres queridos, y a quienes siempre lo admiraron. Porque a fin de cuentas, Watanabe fue una estrella. Un rockstar Nikkei, que en los 10 años que estuvo en Chile entregó lo mejor de lo que sabía hacer: cocinar como los dioses. Siempre con estilo y genialidad.
