Un grupo de científicos ha sacado importantes conclusiones sobre el origen de la intolerancia al gluten, una enfermedad autoinmune que afecta al 1% de la población, pero que se ha duplicado en las últimas décadas.
“Si tienes enfermedad celíaca, comer gluten desencadena una respuesta inmunitaria a la proteína del gluten en el intestino delgado. Con el tiempo, esta reacción daña el revestimiento del intestino delgado e impide que este absorba nutrientes, lo que se llama malabsorción“, así define Clínica Mayo esta afección autoinmune.
Hasta ahora, no existe un tratamiento para quienes sufren de esta afección. Y lo único que pueden hacer para evitar síntomas y dolores, es eliminar el gluten completamente de su dieta. Sin embargo, un reciente descubrimiento científico, cambia la dirección de esta enfermedad.
Un equipo científico, que ha dedicado los últimos seis años a este propósito, ha hecho un descubrimiento clave. Y dado con “una importante pieza del rompecabezas” de la celiaquía, dando la respuesta a las preguntas “cómo” y “dónde” se origina la respuesta al gluten en el organismo.
La revista Gastroenterology, publicó los resultados de un estudio realizado por investigadores de la Universidad McMaster de Canadá y científicos de Estados Unidos, Australia y Argentina, arrojando factores claves en su ahora posible tratamiento.
Como se sabe, los celíacos deben evitar el gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, el centeno y la cebada, y que desencadena síntomas dolorosos en el intestino. Además, impide la absorción de nutrientes y aumentar el riesgo de otros problemas graves en el tiempo. De ahí la importancia de dar con respuestas.
Hasta ahora, se creía que esta respuesta inflamatoria al gluten tenía su origen en la pared intestinal. Y que era en esa zona donde intervenían células inmunitarias. Sin embargo, esta investigación da cuenta de otros factores.
Durante la investigación, los expertos notaron que el revestimiento interior de la parte superior del intestino, el epitelio, también tiene un rol activo en la respuesta inflamatoria al gluten, aún cuando no está compuesto por células inmunitarias.
El equipo creó un modelo biológicamente funcional del epitelio intestinal, permitiendo a los investigadores aislar los efectos de moléculas específicas en las células epiteliales de personas celiacas. Lo que, a su vez, posibilitó a los científicos generar y observar las reacciones en condiciones controladas. Logrando observar cómo las moléculas alertan a las células inmunitarias de la presencia del gluten, concluyendo que “el epitelio desempeña un papel crucial en la activación del sistema inmunitario en la celiaquía”.
Si bien esto ya se había manifestado como una hipótesis anteriormente, no habían podido demostrarlo. Y ahora esperan que, a partir de esta respuesta, se pueda avanzar en el desarrollo de un tratamiento médico.
“Hoy en día, la única forma de tratar la enfermedad celíaca es eliminar por completo el gluten de la dieta. Esto es difícil y los expertos coinciden en que una dieta sin gluten es insuficiente”, afirma Elena Verdu, de la Universidad McMaster.
Al localizar qué es lo que inicia la respuesta inmunitaria, se pueden enfocar en el desarrollo de fármacos que tengan la capacidad de inhibir esta función del epitelio. Por su parte, Verdu confirmó que ya hay fármacos en fase de ensayo clínico.