Encaramada en el Cerro Alegre y construida en 1904 por un médico inglés y luego de tener dos dueños, es adquirida por la congregación italiana de monjas Paulinas. Ellas habitaron esta casa durante 40 años. Sin ir más lejos, una de las primeras ideas para bautizar este hotel fue llamarlo Casa Convento. La familia de Paula, su dueña, le compra el inmueble a las religiosas y la habitan durante 20 años, durante los cuales fueron reuniendo una colección de más de 100 objetos de arte y artesanía de diversos lugares del mundo como China, Marruecos, Irán, Siria, Tailandia, Perú, México, entre otros destinos y que hoy es uno de los principales atractivos de esta casa patrimonial de espacios amplios y vista despejada, ideal para un escape de la ciudad, pensada para el descanso y el disfrute. CasaBlu Hotel termina siendo una gran alternativa para alojarse dentro de un espacio une la historia patrimonial y cosmopolita del puerto, con modernas y confortables instalaciones que permiten disfrutar al máximo de la belleza y vida cultural de la ciudad porteña, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Un lugar placido y con una vista privilegiada de 360 grados a la bahía y al puerto. Cuenta con un cálido patio donde se ubica una fuente de agua de origen marroquí y que es un espacio que se puede usar para desayunar, además de una terraza con amplio balcón para disfrutar una cortesía de la casa desde un viñedo de la región, o si gusta un momento más calmo con la lectura de un buen libro, lo puede hacer en el living que guarda el estilo original de la casa.

CasaBlu Hotel cuenta con un sistema de cocina abierta, en el caso que los huéspedes deseen pedir servicio de delivery o llevar su comida, se les facilita el espacio a través de un amplio comedor con vigas de pino oregón original a la vista. Así como sus puertas de madera talladas fueron especialmente traídas desde Inglaterra a principios del siglo XX, como contábamos anteriormente, cada espacio de CasaBlu Hotel ha sido decorado con objetos únicos que dan cuenta de viajes, pasiones y obsesiones familiares. Coloridos tapices del medio oriente; santos, ángeles y vírgenes latinoamericanas; cabezas de Buda centenarias, pero también, mobiliario y obras de arte contemporáneas, construyen un ecosistema sensorial rico en historia, vanguardia y sincretismo.

Quienes decidan hospedarse en sus irresistibles instalaciones, podrán tener orientación del personal del hotel respecto a la oferta gastronómica que se ofrece en los cerros. Con permanente frecuencia en CasaBlu están actualizados respecto a las recomendaciones culinarias y también de panoramas culturales que crecientemente van poblando la agenda en el puerto principal. Con un total de 13 habitaciones, en donde cada uno de los pisos ha sido cuidadosamente restaurados, conservando las huellas de sus pasados habitantes. CasaBlu Hotel es un lugar que mezcla lo clásico y lo moderno en sus instalaciones, la luz y la fuerza del puerto de Valparaíso que la envuelve. Acogedor y elegante por partes iguales, sin lugar a dudas CasaBlu Hotel es un lugar que vale la pena conocer.

Más información en su Instagram: @casabluhotel y en su sitio web www.casablu.cl