Hace muchos años que un desfile no sorprendía tanto. Y no hablamos de moda ni tendencia. Hablamos de la cantidad de personalidades ícono que desfilaron juntas en una pasarela y solo despertó un sinfín de alegres e impactadas exclamaciones entre el público presente. Por cada modelo que aparecía, una ovación. Estamos oficialmente ante un renacer de los 90’s en todo su esplendor, y en el caso de la moda, el regreso de las grandes supermodelos, pero en el show primavera-verano 2022 de Balmain en París no solo se restringió a la década que graficó tan bien George Michael en su video Too Funky, porque el diseñador de la casa Oliver Rousteing también sumó a las grandes exponentes de la pasarela de los 80 y los 2000.
Desde Carla Bruni, pasando por Naomi Campbell, Karen Elson, Natalia Vodianova, Milla Jovovich y Lara Stone, entre otras, todas reunidas en un mismo lugar, una sorpresa tras otra, esas donde se cree haberlo visto todo, venía algo más. Y como si fuera poco, todo al ritmo de Beyoncé. Vestidos con pedrería y grandes hombreras ajustados al cuerpo, mezclado con prendas más deportivas. El mensaje era cómo la moda puede evolucionar y al mismo tiempo mirar al pasado para recuperar el glamour y el brillo de los años de las súper modelos donde la ítalo-francesa Carla Bruni tuvo un rol protagónico.
Y es que son días contradictorios para la hoy exitosa cantante. Durante el día de ayer, se confirmó que su marido, el ex presidente Nicolás Sarkozy fue sentenciado con presidio domiciliario por cargos de financiamiento ilegal de su campaña presidencial de 2012. El político tendrá que pasar su condena dentro de su hogar con brazalete electrónico. La responsable de la contención entonces será la propia Carla Bruni, quién tendrá que pasar los días haciéndole compañía mientras compone nuevas canciones.