Cuando se trata de la flora y la fauna, siempre es bueno recibir noticias en medio de un potente cambio climático. Y más allá tratarse de una población mayor a la que se creía, las buenas nuevas continúan.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) asegura que la población de tigres en estado salvaje es mayor a la que se estimaba hasta ahora. Es más, reveló que sus poblaciones parecen estabilizarse o incluso aumentar. Eso sí, alertan que el mayor felino del mundo sigue siendo una especie el peligro de extinción.
Las últimas estadísticas existentes sobre la población mundial del animal correspondían a 2015. El nuevo recuento estima que hay entre 3.726 y 5.578 ejemplare, un 40 por ciento más de la data recolectada anteriormente. Según explican, esto se debe a que se han aplicado “mejoras en las técnicas de seguimiento”.
La UICN destacó que “las tendencias demográficas indican que proyectos como el Programa Integrado de Conservación del Hábitat de los Tigres de la UICN son eficaces y que la recuperación es posible mientras continúen los esfuerzos de conservación”. Evidentemente, esto no significa que los tigres estén a salvo, pero las medidas tomadas han tenido un efecto positivo.
“Las principales amenazas incluyen su caza furtiva y la caza de sus presas, así como la fragmentación y destrucción de su hábitat debido a las crecientes presiones de la agricultura y los asentamientos humanos”, advierte la UICN. “Para proteger a esta especie, es esencial ampliar y conectar las áreas protegidas entre sí, garantizar su gestión eficaz y trabajar con las comunidades locales que viven dentro y alrededor de los hábitats de los tigres”, agrega la institución.
Un estudio publicado por la revista Scientific Reports asegura que es vital para la supervivencia de los grandes carnívoros que existan leyes nacionales e internacionales al respecto. Las investigaciones demuestran que los carnívoros protegidos tienen hasta 6,8 veces más probabilidades de tener un menor riesgo de extinción. De ahí la importancia de que exista una protección legal a los animales más vulnerables.
Otra historia completamente diferente es la mariposa monarca migratoria. Recientemente se descubrió que su población ha descendido entre un 22 y un 72 por ciento en los últimos diez años. Por lo mismo, ha ingresado a la Lista Roja de la UICN. Y en el caso de los esturiones, 26 especies que quedan en el mundo están en peligro de extinción.