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Su colega Dan Aykroyd, que rodó el clásico de la década de los 80, Cazafantamas, bautizó a Bill Murray como Murricane (un juego con su apellido y la palabra huracán). A los 71 años, Bill Murray ha vuelto a ponerse en el centro de la polémica por su comportamiento inapropiado en un rodaje. Hace unos días se paralizó la filmación de Being mortal, su nueva película, luego de recibir quejas de varias mujeres que se habían sentido incómodas por haber sido tocadas por el actor sin su consentimiento.
La productora Searchlight Pictures ha puesto en marcha una investigación para determinar la responsabilidad del intérprete en lo que se considera “un ambiente tóxico de trabajo”. Compañeros de reparto y personal del equipo técnico se han quejado de la conducta de Murray. Según testimonios han asegurado que a Murray “le encanta coquetear, disfruta de la poesía y el romance, pero siempre envuelto en comedia” por lo que, asegura, “no está claro si se pasó de la raya”. Por el momento, se desconoce si el actor seguirá formando parte del reparto una vez haya concluido la investigación. El actor Richard Dreyfuss habló de una mala relación con el actor en 2009. “Puso su cara contra la mía, nariz con nariz, y gritó con todas sus fuerzas: “¡Todo el mundo te odia! ¡Solo te toleran!”. No tuve tiempo para reaccionar porque se echó hacia atrás y cogió un cenicero moderno de cristal y me lo tiró contra la cara. Trató de golpearme. Me levanté y me fui”. Dreyfuss también describió a Murray como un “matón borracho”.
La actriz Lucy Liu afirmó que el actor la insultó en repetidas ocasiones durante el rodaje de Los Ángeles de Charlie. Según cuentan, el actor se pasó el rodaje cuestionando las dotes interpretativas de Drew Barrymore y Cameron Díaz mientras que a la actriz asiática le hizo la vida imposible porque no creía que estuviera a la altura del resto del elenco. “¿Tú, qué haces aquí, si no sabes actuar?”, le dijo mirándola a la cara.
Bill Murray forma parte de esa lista negra de Hollywood formada por actores con los que nadie quiere trabajar. Christian Bale es uno de ellos. Con un talento indiscutible, tiene serios problemas para controlar su ira. Durante la filmación de Terminator Salvation el actor galés tuvo un violento comportamiento contra el director de fotografía, Shane Hurlbut, por interrumpir accidentalmente la grabación de una escena. Un miembro del equipo filtró el audio a la prensa y Bale quedó expuesto. La actriz española Aitana Sánchez Gijón, que protagonizó junto al actor la película El Maquinista, afirmó que su colega prácticamente no hablaba con nadie. Y Natalie Portman sufrió durante la grabación The Knight of Cups de Terrence Malick, debido al perfeccionismo de Bale, que obligaba al equipo y a sus compañeros de reparto a repetir las escenas una y otra vez hasta que él quedaba completamente satisfecho.
Otro insoportable compañero de trabajo es Shia LaBeouf. Sus muchas excentricidades y continuos ataques de ira lo han convertido en uno de los actores más insoportables del cine. En Fury, el actor estuvo varias semanas sin ducharse con la excusa de “meterse en el papel”. El director del filme y el mismísimo Brad Pitt le advirtieron sobre su comportamiento inadecuado pero le dio lo mismo. Finalmente, los productores lo alojaron en un hotel apartado del resto del equipo. En Lawless también provocó problemas, Mia Wasikowska terminó con ataque de nervios y Tom Hardy acabó recibiendo un combo.
Edward Norton también está en esta lista. Conocido en la industria por apropiarse de los proyectos en los que trabaja, durante la post producción de American History X, el actor se metió en la sala de montaje dejando fuera al propio director y agregó escenas para tener mayor protagonismo. Nick Nolte terminó dejando el proyecto Cuestión de Honor porque Norton se metía donde no le llamaban: “interrumpía y no dejaba de indicarnos a los demás actores cómo debíamos interpretar nuestros personajes”.
Entre las actrices, Katherine Heigl, la que dejó de ser Izzie Stevens en Grey’s Anatomy por sus constantes exigencias, y Gwyneth Paltrow, que se hizo de una fama de pretenciosa y con malos modos en los rodajes, también forman parte de esta lista de los más odiados.
