Desde hace tiempo, no solo asistimos a un concierto de música, sino que vamos por la experiencia. Y para ello, los artistas también hacen su parte, buscando nuevas formas de sorprender y encantar a su público. En muchas ocasiones es la tecnología la que permite dar ese paso y hace unos días, el vocalista de U2 parecía flotar en medio de una gigantesca cúpula llamada The Sphere en Las Vegas.
La banda irlandesa U2 con el inefable Bono a la cabeza, ha dejado a todos impresionados durante su estancia en Las Vegas. Y es que han sido los encargados de inaugurar esta gigantesca cúpula llamada The Sphere, con la más alta tecnología sonora y lumínica. Como podríamos suponer, se trata de un viaje hecho para Instagram y las redes sociales.
La banda cuyos éxitos One y Pride (in the name of Love), se caracterizan por shows de gigantescas estructuras y de una espectacularidad cada vez más avanzada, pero esto supera todo lo visto. Y es que con esto queda en claro que, actualmente, tener una residencia en Las Vegas no es señal de que tu carrera está en la decadencia misma. Lo dice Adele, lo dirá Kylie Minogue y lo reafirma hoy U2, con un espectáculo dentro de un domo con una capacidad que oscila entre 17 mil 600 y 20 mil espectadores.
En el exterior, cuenta con 580.000 pies cuadrados de LED, “¡un lienzo creativo tan audaz y brillante que se puede ver desde el espacio!”, se lee en el sitio web. “Sphere es el lugar adecuado para llevar la experiencia de la música en directo al siguiente nivel”, explican los miembros de U2 en el mismo medio, “es más que un lugar, es una galería y la música de U2 va a estar por todas las paredes”.
La estructura esférica de 109.7 metros de alto por 157.2 de ancho, es la más grande del planeta a un costo de dos mil 300 millones de dólares. Significó cuatro años de trabajo. Para hacerse una idea de sus dimensiones, la Estatua de la Libertad de 93 metros, cabe completa en su interior. Contiene casi 49 mil metros cuadrados, equivalente a cuatro canchas de fútbol americano.
En el interior de The Sphere, las pantallas desde el suelo hasta el cielo ofrecen una resolución de 16K combinados con 167 mil parlantes para un sistema de audio inmersivo. Por si fuera poco, son robots reciben a los asistentes. Según testigos, la sensación del sonido equivale a percibir el audio como si los altavoces estuvieran prácticamente al lado y no a decenas de metros, con gran calidad y nitidez.
La pantalla LED del interior con más de 260 mil millones de pixeles “envuelve al público por encima y por detrás”, explica la web de la esfera, “creando un entorno visual totalmente envolvente”. Se detalla la utilización de “fórmulas de proyección de lentes y las matemáticas de la trigonometría esférica para mapear las imágenes que capturamos en esta gigantesca pantalla curva”.
Ver esta publicación en Instagram