Con el coronavirus rondando el panorama más seguro sigue siendo el confinamiento. Y tal como a muchos, este año su cumpleaños le tocó en medio de la pandemia. Pero el no salir de casa no fue impedimento para que la actriz recibiera sus 39 años.
Si bien toda la familia real saludó a la duquesa de Sussex el pasado 4 de agosto, a través de las cuentas oficiales de Instagram, Meghan y Harry disfrutaron de un momento íntimo. Precisamente lo que buscaban tras su salida de la realeza como miembros activos.
Según una fuente cercana a la pareja, Harry habría preparado una cena íntima y romántica, con la ayuda de su suegra Doria Ragland. Quien se habría encargado de cuidar al pequeño Archie, mientras el matrimonio disfrutaba de la comida. Además, la fuente aseguró al The Mirror que desde que se mudaron, el príncipe Harry pasa mucho tiempo en la cocina.
“Harry y Meghan llevaron a Archie a casa de su abuela Doria por la tarde para que cuidara del pequeño mientras ellos disfrutaban de un tiempo en pareja”, afirmó la misma persona, y reveló que “Harry preparó una cena de tres platos para Meghan” en cuya elaboración también pidió ayuda a Doria. “Aunque Harry se ha convertido en un mejor cocinero desde que se casó, todavía tiene mucho que aprender”.
Pero la comida hecha en casa por el príncipe no fue la única sorpresa. Harry cocinó, pero también le tenía un regalo muy original. Un collar diseñado por él y una foto de ambos enmarcada.