Josefa Cordua es la primera artista chilena que visita Qatar, invitada por Art Academy International, una innovadora institución que provee cursos y workshops de arte en ese país.
Se trata de un centro artístico privado que lleva a expertos de diversas partes del mundo para que muestren una técnica puntual a ser enseñada en ese país. Tras ver el trabajo de Josefa Cordua en Instagram, sobre su técnica figurativa, surgió el interés que la llevó a recibir una invitación vía email de dicha institución.
“Les gustó mi trabajo, me comentaron que les llamó la atención mi técnica y querían que se las enseñara allá, en su país. Así es como elaboré un workshop llamado ‘Foliage and Landscape Painting’, vinculado con desarrollar imágenes de paisaje y follaje, pintando distintos planos de follaje natural, naturaleza y hojas en primer plano con más detalle, entre otros elementos”, dice.
Así es como esta artista, de 35 años de edad, partió a Qatar junto a su marido y dirigió un workshop corto e intensivo en horas, de cerca de una semana, para que un grupo de qataríes, principalmente mujeres, recibieran algunos secretos de su técnica para hacer follajes y paisajes, cercanos al estilo realista, sin serlo propiamente tal.
“Les gusta mucho el realismo, quizás, por eso me contactaron a mí que trabajo paisajes naturales figurativos. Y además que es algo nuevo allá, porque habían hecho varios de retratos, pero no habían hecho mucho de paisaje”, agrega la pintora.
Cordua agrega que fue una muy buena experiencia, “poder llevar mi arte hasta un lugar tan lejano y distinto, con un paisaje que no están acostumbrados a ver con ese nivel de verde. Allá, todo es desierto, seco. Un día salieron a ver una pequeña llovizna en la noche, una rareza que agradecen porque no sucede nunca. De hecho, cuando llueve hacen como un picnic al aire libre, así agradeciéndole al mundo que esté lloviendo; en vez de encerrarse, salen al exterior, porque es como un milagro.
Añade que fueron muy bien recibidos, y que los alumnos, tímidos en un comienzo, fueron muy disciplinados e interesados por aprender su técnica de trabajo. “Eran 6 horas de clases diaria y algunos días se alargó, porque querían alcanzar a hacer más progresos en sus cuadros, antes que yo me volviera a Chile”.
Eso sí, “no pudimos terminar el cuadro, al parecer nadie termina en tan pocos días, todo es muy rápido. Yo un cuadro de esas características, puedo tardar semanas e incluso meses en realizarlo”, indica Josefa Cordua, quien firmó su primer autógrafo a una de las alumnas que se lo solicitó.
“Fue muy divertido… mi primer autógrafo. Los alumnos estaban felices. La cultura demasiado distinta. Y bueno, teníamos algunos alumnos que no querían aparecer en cámara, ni siquiera de espaldas. Por un asunto de religión deben andar con el burka, y no usarlo puede ser un signo de rebeldía”, indica la artista chilena, quien además de su obra personal, realiza cuadros por encargo. ( @josefa.cordua , www.josefacordua.com )