Las duras batallas legales que mantenían Angelina y Brad Pitt desde el divorcio, solo habían conseguido distanciar a la familia. Todo reflejaba un padre cada vez más lejos de sus hijos y problemas de comunicación con la madre. Sin embargo, todo parece indicar que finalmente decidieron recurrir a la ayuda profesional para resolver sus problemas en favor de los niños.
El divorcio de la ex pareja fue debido a “diferencias irreconciliables”, según la declaración legal de la actriz. Desde entonces, ambos pusieron fin a unos de los matrimonios más estables de Hollywood, pero dieron inicio a una relación poco amigable. Abiertamente hostil y tirante, la que afectó directamente la relación de Brad con sus hijos.
Sin embargo, tras cuatro años, parece que finalmente han encontrado la forma de convivir en paz. Y según revista People, este acercamiento se debe precisamente a la ex pareja y su decisión de hacer “mucha terapia familiar”. Y hace algunos días, los medios divisaron al ganador del Oscar saliendo de la casa de Jolie en Los Ángeles, donde vive junto a sus seis hijos: Maddox, de 18 años, Pax, de 16 años, Zahara, de 15 años, Shiloh, de 14, y los mellizos Knox y Vivienne, de 11.
Cercanos a Jolie y Pitt comentaron al mismo medio que “han llegado a un punto en el que hay menos tensión entre ellos y ahora sus hijos pueden pasar más tiempo con ambos“. Y agregó que “necesitaban ayuda para resolver todos los problemas relacionados con la custodia de los niños y sobre cómo Brad podría ser padre de nuevo“.
Y es que los niños que comparten como ex matrimonio, siempre fue la preocupación de ambos. “Como los niños son mayores ahora, ya no están lidiando con los problemas de separación de Angie. Les ha llevado mucho tiempo, con mucha terapia familiar, llegar a este punto. Los niños más pequeños van y vienen entre sus casas, y a Brad le encanta pasar tanto tiempo con ellos como sea posible. Parece mucho más feliz“.
Tanto para Angelina como Brad Pitt, sus hijos son lo más importante y así lo han manifestado en diferentes ocasiones. Tras la separación y problemas entre los adultos, el actor se vio muy afectado por la distancia. Pero siempre los tiene presentes, y tras recibir el Oscar aseguró que “Esto es para mis hijos que motivan todo lo que hago. Los quiero”.