A todos les sorprendió el cambio. La vimos llegar en un sobrio pero dramático traje negro, con un maquillaje dark a tono con su vestido y un moño muy tirante. Era la performance que Lady Gaga nos tiene acostumbrado. Solo horas antes se había confirmado su presencia en la ceremonia, donde interpretaría el tema central del éxito de taquilla Top Gun: Maverick, y que había sido nominada a la categoría de Mejor Canción Principal. Lo que nadie imaginó era lo que vendría luego.
Como si fuese otra persona totalmente distinta, al momento de salir a interpretar Hold my Hand, la canción en cuestión, vimos a la estrella del pop como pocas veces antes. De zapatillas negras Converse, jeans negros rajados, polera negra cuello poco sin ningún estampado y su rostro absolutamente al natural. Todo el mundo quedamos con la gran interrogante ¿Qué pasó acá? ¿Cómo hizo para, en tan poco rato (recién la habían enfocado entre el público tal como llegó al Dolby Theatre y disfrutando de la ceremonia), quedar absolutamente desmaquillada, “a cara lavada”, como se dice?
La respuesta es: Aceite de argán. Usado para desmaquillar el rostro. La encargada personal del maquillaje de la cantante y actriz lo utilizó para eliminar todo rastro de maquillaje durante su presentación en la entrega de premios de la Academia. Y es que, al parecer, el aceite de argán está siendo utilizado para desmaquillar según la técnica del denominado skin streaping, un verdadero desnudamiento de la piel.
La técnica de limpiar el rostro con una primera pasada de aceite es típica de la elaborada rutina coreana de varios pasos para la piel. Pero, ¿por qué aceite de argán para desmaquillar? En realidad, todos los aceites vegetales, desde el de argán hasta el de palta o el de almendras, son eficaces para este fin, y la razón es sencilla: En la fase de limpieza de la piel, los aceites son ideales porque, al ser lipofílicos, disuelven muy bien las impurezas y el maquillaje más resistente, como el rímel o el delineador de ojos.
Al mismo tiempo, el aceite, mientras limpia y desmaquilla, tiene la capacidad de hidratar y nutrir la piel. Sin embargo, solo el aceite no es suficiente para una limpieza completa: después de aplicar aceite de argán es necesario continuar con un segundo paso con una leche, para pieles delicadas, o con un gel o mousse, si eres de piel normal, mixta o grasa. Por último, recuerda que los limpiadores oleosos son ideales para las pieles sensibles, ya que, a diferencia de los jabones espumosos, no afectan a la barrera cutánea protegiendo las pieles más delicadas.