Durante las últimas semanas, hemos recibido frecuentes noticias de quiebres y rupturas sentimentales. Desde la de Ricky Martin con Jwan Yosef, pasando por el reciente fin del corto affaire entre Timothée Chalamet y Kylie Jenner, hasta quizás la más sonada de todas: el alejamiento -al parecer sin vueltas, entre Rosalía y Rauw Alejandro.
Pero en algunos casos, se ha cumplido aquel lema de que “el amor siempre gana”. Y aunque suene increíble, sucede. Pasa en la ficción, como el revival que estamos viendo entre Carrie Bradshaw y su antiguo amor, Aidan Quinn, en And Just Like That; o la segunda oportunidad que se dio la influencer española hija de Isabel Preysler, Tamara Falcó, que perdonó la infidelidad de su novio Iñigo Onieva, y hace algunas semanas terminaron en el altar.
No siempre es así en las relaciones humanas. Pero hay casos famosos donde ambas partes se reencontraron, después de una ruptura, y cuando nadie lo esperaba decidieron darse una oportunidad y quedarse juntos. Quizás la primera época del romance no era el momento para ninguno de los dos. En esos casos se cumple aquello de que hay que estar en el lugar y el momento indicado. O que merecían tener otras historias antes para valorar a ese antiguo amor que se tuvo alguna vez. Segundas oportunidades emblemáticas como la de Ben Affleck y J.Lo, nos hacen pensar qué haríamos nosotros en sus zapatos ¿Volveríamos con nuestros/as ex?
Aidan era el amor no-tóxico de Carrie y nos gustaba para ella. Años pasan y volver a pensarlos juntos no se veía cosa fácil, pero en la ficción todo puede pasar. Lo cierto es que la realidad nos ha demostrado -y hay datos que lo apoyan- que la mayoría de las personas sí lo intenta. Se estima que el 66% de las relaciones que terminan vuelven después de un año. Y de ese 66%, la mitad de ellos terminó por separarse definitivamente después de volver a intentarlo.
“Me bajé del avión”, le dice Rachel a Ross en el último capítulo de Friends cerrando sus idas y venidas con un final feliz. Eso en la ficción. En la vida real, triunfos y derrotas de las nuevas oportunidades están divididas. Ejemplos conocidos, recientes son los de Bradley Cooper e Irina Shayk, que lo están intentando. O los mencionados, Ben Affleck y Jennifer Lopez, quienes parecen estar felices con este comeback luego de 17 años de su primera relación. Pero también está el príncipe William y Kate Middleton, quienes tuvieron un receso durante su noviazgo y ya los ven. Entre los intentos fallidos se cuenta la tormentosa relación entre Elizabeth Taylor y Richard Burton, quienes se casaron y se divorciaron dos veces durante 12 años, entre idas y venidas. Relaciones tóxicas como las de Rihanna y Chris Brown, con malos tratos incluido entre la primera y segunda vez o infelices como la de Eminem y Kim Mathers, que terminaron peleándose por la custodia de su hija.
Hay casos en punto suspensivo, como el de las estrellas pop Camila Cabello y Shawn Mendes, que desde 2018 estuvieron juntos, se separaron en 2021, sin embargo en el último Festival Coachella se les vio besarse apasionadamente. En 2009, Justin Bieber conoció a Hailey, ella en calidad de fan. Pero no pasó nada hasta 2015 donde vivieron un breve romance, pero en 2016 se convertían oficialmente en pareja, sin embargo, a los meses se separan y él comienza a salir con Selena Gómez y ella con Shawn Mendes. Pero el amor triunfó en 2017, se casaron en 2018 y ahí siguen. Hasta con rumores de que convertirían en padres por primera vez.
Justin Timberlake y Jessica Biel se conocían en 2007. Amistosamente se separan en 2011, pero no dejaban de verse. En 2012 anunciaron compromiso, se casaron el mismo año y en 2015 tenían a su primer hijo. Katy Perry y Orlando Bloom son otros que bien bailan. Se conocieron en 2016 para los Globos de Oro y al año siguiente terminaron de manera muy discreta. Se reencontraron en 2018, se comprometieron al año siguiente, una boda que quedó en suspenso porque vino la pandemia del COVID-19 y en 2021 nacía su primera hija. El altar podrá esperar.
El último ejemplo es histórico. Goldie Hawn y Kurt Russell, se conocieron en 1966 pero no fue hasta 1983 que empezaron a salir. Goldie venía de relaciones con Burt Reynolds y Warren Beatty, además de un divorcio y dos hijos. Pero se enamoraron y terminaron siendo de las parejas más estables de Hollywood hasta 2004 cuando deciden divorciarse. Pero tiempo después hubo una reconciliación y siguen juntos hasta nuestros días.