Victoria y David Beckham reaparecieron públicamente este fin de semana al asistir a la boda de Holly Ramsay, hija del reconocido chef Gordon Ramsay, en un contexto marcado por la persistente tensión familiar que atraviesan con su hijo mayor, Brooklyn Beckham.
La pareja llegó a la Abadía de Bath, en Inglaterra, para acompañar el matrimonio entre Holly Ramsay y el nadador olímpico Adam Peaty, una ceremonia que reunió a figuras cercanas del círculo familiar y social de los novios. Lejos de mostrarse incómodos, ambos se dejaron ver tranquilos y concentrados en la celebración.
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Para la ocasión, Victoria Beckham, optó por un vestido satinado de manga larga, complementado con lentes de sol oversized y un pequeño abrigo de piel. David, en tanto, vistió un traje negro con humita y un abrigo beige. Junto a ellos estuvo su hijo Romeo, de 23 años, quien eligió un traje negro clásico.
La boda se concretó tras el compromiso anunciado en septiembre de 2024. Holly Ramsay, de 25 años, y Adam Peaty, de 31, sellaron su relación en una ceremonia íntima pero de alto perfil, acorde a sus trayectorias públicas.
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El anfitrión del día, Gordon Ramsay, compartió un mensaje en redes sociales para marcar el momento. “Soy verdaderamente afortunado de poder acompañar a esta hermosa novia hasta el altar y de ganar un increíble yerno“, escribió el chef.
La asistencia al matrimonio ocurrió poco después de que se diera a conocer que Brooklyn Beckham habría bloqueado a sus papás en Instagram a comienzos de mes. Según explicó su hermano menor, Cruz, el hecho ocurrió de manera inesperada, asegurando que sus padres “despertaron bloqueados” un día. El propio Cruz salió al paso de versiones que señalaban que Victoria y David habían dejado de seguir a Brooklyn, afirmando con claridad: “Mi mamá y mi papá jamás dejarían de seguir a su hijo”.
Pese al episodio, Victoria Beckham evitó referirse directamente al tema y días después se mostró públicamente en una salida nocturna, sin dar señales de incomodidad frente a la situación.
En octubre, una fuente cercana señaló a Us Weekly que Brooklyn no tenía “ningún interés” en retomar el vínculo familiar. Y que estaba “realmente enfocado en llevar una vida tranquila y sin dramas” junto a Peltz. Un escenario que, por ahora, sigue marcando las apariciones públicas de una de las familias más observadas del espectáculo internacional.
