Brad Pitt obtuvo un nuevo respaldo judicial en la disputa legal que mantiene con Angelina Jolie por Château Miraval, el viñedo francés que adquirieron durante su matrimonio. Y que hoy, se ha convertido en uno de los puntos más tensos de su prolongado conflicto.
Un juez falló a favor del actor y ordenó que Jolie entregue correos electrónicos privados y cadenas de mensajes de texto relacionados con la venta de su participación en la propiedad. La decisión se basa en documentos judiciales publicados por Page Six y se enmarca en la demanda presentada por Pitt tras la venta de la parte de la actriz al Grupo Stoli en 2021.
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La resolución obliga a Angelina Jolie, de 50 años, a entregar las comunicaciones solicitadas en un plazo de 45 días. Según una fuente citada por el mismo medio, “los correos demostrarían que Jolie ha sido poco sincera desde el inicio respecto a sus verdaderas intenciones sobre la venta de su participación en el negocio”.
Desde la defensa de la actriz, la reacción fue inmediata. Su abogado, Paul Murphy, expresó su desacuerdo con la interpretación del tribunal: “Estamos decepcionados por la interpretación que hizo el tribunal de la ley de privilegio de California”. Y añadió: “El fallo del tribunal viola esa ley, socava el derecho fundamental de la señora Jolie a un juicio justo. Y representa otra manifestación más del esfuerzo de años del señor Pitt por acosarla y controlarla. Vamos a apelar”.
La disputa se remonta a la compra del viñedo en 2008, por un monto de 28,4 millones de dólares. En una presentación judicial realizada en febrero, el actor, hoy de 62 años, sostuvo que ambos acordaron no vender sus participaciones sin consultarse mutuamente.
Según los antecedentes incluidos en la causa, la expareja, que se casó en 2014 y se separó en 2019, tenía planes de criar a sus hijos en la propiedad y convertir Miraval en un negocio familiar, lo que refuerza el argumento de Pitt sobre el carácter conjunto del proyecto.
Angelina Jolie había insistido previamente en que no estaba obligada a entregar correos ni mensajes, argumentando que se trataba de conversaciones sobre asuntos legales protegidos por privilegio. En ese contexto, su defensa acusó a Pitt de intentar acceder a información confidencial, señalando que estaba “invadiendo” las “comunicaciones privilegiadas con sus abogados”.
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Con la orden judicial ya dictada y una apelación anunciada por la defensa de Jolie, el caso por Château Miraval sigue abierto y suma un nuevo capítulo a una de las batallas legales más prolongadas y complejas del Hollywood contemporáneo.
