Lo que comenzó como un millonario robo en Los Ángeles terminó transformándose en un ejemplo de coordinación policial entre Chile y Estados Unidos. Keanu Reeves envió una carta manuscrita a las autoridades chilenas para agradecer el operativo que permitió recuperar seis relojes de alto valor, uno de ellos utilizado en el set de John Wick, sustraídos desde su casa en 2023 por una banda conocida por robar en barrios acomodados del extranjero.
El actor no solo reconoció las piezas en las fotografías enviadas por los agentes, sino que recibió oficialmente sus relojes en agosto, durante una reunión en Nueva York con equipos estadounidenses, según reveló Los Ángeles Times. En su misiva, Reeves expresó su “profunda gratitud y aprecio”, destacando el trabajo conjunto de todas las instituciones involucradas, “incluyendo al LAPD, la oficina local del FBI en Los Ángeles, la oficina del FBI en Santiago, Chile, la Policía de Investigaciones (PDI) y la Fiscalía de Chile”. También agregó: “Muchas gracias por todo su esfuerzo, dedicación, profesionalismo y cooperación transfronteriza. Mis más cálidos saludos, Keanu”.
La investigación reveló que la red responsable del robo viajaba a Estados Unidos para cometer delitos y volver a Sudamérica con artículos de lujo enviados incluso por correo o courier. Según el FBI, estas bandas han ampliado su alcance a casas de celebridades, deportistas y comercios de alto estándar.
En Chile, unidades especiales habían comenzado a rastrear a un grupo activo en el sector oriente de Santiago, sospechoso de robos residenciales e incursiones violentas. Los allanamientos, realizados en conjunto con el FBI, permitieron recuperar objetos de Reeves y de otro afectado. Entre la evidencia confiscada se encontró un teléfono con una fotografía tomada en Estados Unidos que mostraba el reloj John Wick Submariner, un arma y la licencia de conducir del actor, una imagen tomada durante el robo.
Aunque el FBI y el LAPD no han entregado una cifra oficial del avalúo total del robo a Reeves, autoridades chilenas estiman que las pérdidas ascienden a varios millones. La investigación sigue abierta, ya que las policías buscan determinar cuántos robos en Estados Unidos pueden atribuirse a estas bandas, cuya presencia se ha expandido durante los últimos años.
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