La industria del entretenimiento aún intenta procesar la inesperada muerte de Michelle Trachtenberg. La actriz, de 39 años, fue encontrada sin vida en Nueva York el pasado 26 de febrero, dejando a sus fans y amigos en estado de shock.
Fuentes cercanas revelaron a People que Trachtenberg no estaba atravesando su mejor momento. “Le dijo a sus amigos que estaba pasando por un momento difícil”, comentó un informante.
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“Estaba realmente, realmente enferma y fue muy abierta con su círculo cercano sobre lo mucho que estaba luchando”. Además, indicaron que la actriz se veía “pálida, demacrada” y “muy delgada” en sus últimos meses.
Las autoridades respondieron a una llamada de emergencia en la mañana del 26 de febrero en 1 Columbus Place, Nueva York. Según confirmó la policía al mismo medio, al llegar encontraron a Trachtenberg “inconsciente y sin respuesta”. Los servicios de emergencia confirmaron su fallecimiento en el lugar, sin indicios de que haya existido algún delito.
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Aunque la causa de su muerte aún está bajo investigación, un reporte de ABC News señala que la actriz había pasado recientemente por un trasplante de hígado, lo que podría haber derivado en complicaciones.
Pese a que nunca habló públicamente sobre sus problemas de salud, en enero de este año respondió a comentarios sobre su aspecto tras compartir una selfie en Instagram. “Un dato curioso. Esta es mi cara”, escribió en una publicación.
“No es desnutrición ni problemas. ¿Por qué tienen que odiar? Consíganse un calendario”. En otro post, agregó: “He recibido varios comentarios recientemente sobre mi apariencia. Nunca me he hecho cirugía plástica. Estoy feliz y saludable. Revísense, haters”.
Trachtenberg comenzó su carrera en la televisión infantil con Las aventuras de Pete & Pete y All My Children, pero su gran salto llegó con Harriet, la espía en 1996.
Más tarde se convirtió en Dawn Summers en Buffy, la cazavampiros, un papel que la catapultó a la fama. Entre 2008 y 2012, interpretó a la icónica Georgina Sparks en Gossip Girl, personaje que retomó en 2023 en el reboot de Max, marcando su última aparición en pantalla.
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El fallecimiento de la actriz ha dejado un vacío en la industria y en el corazón de quienes crecieron viendo su trabajo. Mientras se esperan más detalles sobre su partida, su legado en el cine y la televisión sigue intacto.
