El ex esposo de Kim Kardashian, Kanye West, vuelve a estar en el ojo del huracán tras un controvertido anuncio durante el Super Bowl que dirigió a los espectadores a su sitio web.
La razón del revuelo: poleras blancas con una esvástica negra estampada en el frente, a la venta por $20. El símbolo, que tiene un oscuro pasado vinculado con el nazismo y sigue siendo usado por extremistas de derecha, es el único elemento disponible en la página principal de yeezy.com hasta el lunes por la mañana.
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Sin ningún texto explicativo junto al diseño, las camisetas llevan solo el código “HH-01,” que, según la Liga Antidifamación (ADL), es una referencia preocupante.
“La camiseta está etiquetada en el sitio web de Kanye como ‘HH-01’, que es un código para ‘Heil Hitler’“, declaró la organización en un comunicado, donde también destacaron que la esvástica “continúa siendo una amenaza e infundiendo miedo en quienes son blanco del antisemitismo y la supremacía blanca“.
El comercial, que según varios informes solo se transmitió en la región de Los Ángeles, muestra a West en una silla de dentista recibiendo tratamiento. Entre risas, comenta: “Entonces, ¿qué pasa, chicos? Gasté, como, todo el dinero del comercial en estos nuevos dientes”.
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“Así que, una vez más, tuve que grabarlo con el iPhone. Eh, eh, eh, vayan a yeezy.com”. Curiosamente, en el anuncio no se menciona nada sobre las camisetas.
Este lanzamiento ha llegado en un momento en que la cuenta de X de Kanye, donde acumulaba 33 millones de seguidores, ha sido desactivada tras una nueva ronda de comentarios antisemitas y teorías conspirativas sobre los judíos.
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“Me estoy desconectando de Twitter”, escribió el domingo, agradeciendo a Elon Musk por “permitirme desahogarme” y calificó la experiencia de “catártica”. Sin embargo, este cambio repentino de opinión ha dejado a muchos atónitos.
Especialmente después de que el propio Kanye publicara recientemente: “Nunca vendería una camiseta con una esvástica porque las personas podrían ser físicamente agredidas al usarla… Amo a mis fans y seguidores”.
El CEO de la Liga Antidifamación, Jonathan Greenblatt, describió las recientes acciones como “una muestra atroz de antisemitismo, racismo y misoginia”. Esta no es la primera vez que el rapero enfrenta consecuencias por sus comentarios. En 2022 ya había sido bloqueado de la plataforma por afirmaciones similares.
Mientras la polémica sigue en auge, muchos se preguntan si esta es una más de las maniobras de Kanye para mantenerse relevante o si estamos ante algo mucho más preocupante.