Tras un 2024 lleno de desafíos personales, Kate Middleton, de 42 años, ha retomado una de las tradiciones más queridas de la familia real en Navidad: el paseo hacia la iglesia de Santa María Magdalena en Sandringham.
La princesa de Gales estuvo acompañada por el príncipe William y sus tres hijos, el príncipe George (11), la princesa Charlotte (9) y el príncipe Louis (6), además de otros miembros de la realeza, incluido el rey Carlos III y Camilla.
Tomada de la mano de su hijo menor, Kate lució impecable esta Navidad con un abrigo verde de Alexander McQueen que ya había usado en enero pasado durante una visita a Leeds.
Complementó su look con un tocado y bufanda a juego, además de botas y guantes negros. Después del servicio religioso, Kate mostró su calidez habitual al saludar a los presentes. Aceptando flores y tomando el tiempo para conversar con los niños entre la multitud.
La princesa Beatriz decidió pasar estas fiestas con la familia real, tras ajustar sus planes debido a su embarazo. El 25 de diciembre, Beatriz fue vista en la tradicional caminata hacia la iglesia.
Una fuente confirmó a People que la princesa cambió su itinerario original para unirse al evento, al que asistió junto a su esposo, Edoardo Mappelli Mozzi, y el hijo de este, Christopher Woolf, de 8 años.
Beatriz, que espera su segundo hijo, canceló un viaje a Italia con la familia de Edo tras recibir recomendaciones médicas. Según informó previamente el palacio, el bebé está previsto para “principios del nuevo año”.
Durante la caminata, la princesa lució un abrigo beige con cinturón que resaltaba su baby bump. Mientras ponía una mano cariñosa sobre la espalda de Wolfie, como llaman de manera afectuosa al hijo de Edo.
Aunque Beatriz fue la única de los York presente en Sandringham, sus padres, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson, optaron por mantener un perfil bajo. Según se informó, ambos permanecieron en casa.
Esto, debido a las recientes controversias relacionadas con Andrés y su supuesta conexión con una “espía” china. Por su parte, su hermana menor, la princesa Eugenia, celebró la Navidad con la familia de su esposo, Jack Brooksbank.
En cuanto a Eugenia, esta fue la primera Navidad desde su boda en 2018 que no participó en la caminata pública hacia la iglesia. En cambio, eligió pasar las fiestas con la familia de su esposo, junto a sus dos hijos, August, de 3 años, y Ernest, de 1.
La tradición navideña de caminar hacia la iglesia en Sandringham se retomó con fuerza en 2022, luego de ser suspendida durante dos años debido a la pandemia. Este evento es solo una parte de las festividades de la familia real, que incluyen un festín con pavo, jamón glaseado, papas asadas y pudín navideño. Además de la transmisión del mensaje navideño del rey Carlos III.