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Este año, la princesa Beatriz y la princesa Eugenia no participarán en las tradicionales festividades navideñas de la familia real en Sandringham. Y tampoco lo harán sus padres, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson.
En lugar de unirse a la familia real en Sandringham, pasarán el 25 de diciembre en Royal Lodge, su residencia compartida en la propiedad de Windsor. A pesar de estar divorciados desde 1996, la pareja ha seguido cohabitando.
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La noticia de su ausencia en Sandringham surge en medio de informes sobre los supuestos vínculos del príncipe Andrew con una sospechosa espía china, el último escándalo que envuelve al duque de York, de 64 años.
Inicialmente, se esperaba que Andrés y Fergie, se quedaran en Wood Farm, dentro de la propiedad de Sandringham, como lo hicieron el año pasado. Sin embargo, decidieron no asistir debido a la controversia.
La asistencia de Sarah Ferguson en 2023 fue notable, ya que marcó su primera aparición pública en Sandringham en más de 30 años, desde su separación del príncipe Andrés en 1992.
Por otro lado, sus hijas aceptaron invitaciones para pasar la Navidad con las familias de sus respectivos esposos. Beatriz, casada con Edoardo Mapelli Mozzi, actualmente espera su segundo hijo, que nacerá a principios de 2025.
La pareja también tiene una hija, Sienna Elizabeth, de 3 años, y Christopher Woolf, conocido cariñosamente como Wolfie, de 8 años, hijo de Edo de una relación anterior. Eugenie, por su parte, se casó con Jack Brooksbank en 2018, y juntos tienen dos hijos: August, de 3 años, y Ernest, de 1.
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Las hermanas York solo se han perdido una Navidad en Norfolk en la última década: en 2020, debido a la pandemia de COVID-19. Beatrice, de 36 años, y Eugenie, de 34, han pasado la mayoría de las Navidades de sus vidas allí, desde que eran niñas.
