Kamala Harris podría convertirse en la primera presidenta de los Estados Unidos. Pero desde los inicios de su carrera, al posible gran hito que podría completar a fines de este año, hay un largo camino de esfuerzo y perseverancia.
Harris hizo historia en 2020. Es la primera mujer, hija de inmigrantes, en asumir el cargo de vicepresidenta. Y ahora, tras el retiro del actual presidente de Estados Unidos para las próximas elecciones, Kamala aparece como la candidata para reemplazarlo.
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En la convención del Partido Demócrata, que se llevará a cabo en agosto, el partido deberá nombrar a un nuevo candidato que compita contra Donald Trump. Y las posibilidades de que Kamala Harris asuma este papel son altas.
Kamala Devi Harris nació en Oakland, California, pero creció parcialmente en Montreal, Canadá. Su padre es profesor de economía y proviene de Jamaica, y su madre fue una investigadora del cáncer originaria de India.
Tras mudarse a Washington, D.C., estudió ciencias políticas y economía. Y después de graduarse en estudios jurídicos en la Universidad de California en 1989, obtuvo su licencia como abogada un año después.
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Como la primera mujer afroamericana en ser fiscal de distrito en San Francisco, trabajó, entre otras cosas, en la reintegración de ex delincuentes para que tuvieran una segunda oportunidad.
De 2017 a 2020, Harris fue senadora del estado de California y originalmente quería postularse como candidata presidencial del Partido Demócrata para las elecciones de 2020.
Después de que Biden fuera elegido como candidato, la eligió como vicepresidenta. Este mes, Biden pidió finalmente a los miembros del Partido Demócrata que nominaran y apoyaran a Harris en la campaña presidencial.
Harris ha sido parte de varios comités del Senado, incluyendo los de presupuesto, medio ambiente, seguridad nacional y servicios de inteligencia. También ha luchado por un sistema de salud universal y por los derechos de las mujeres.
Durante su mandato como vicepresidenta, se ha centrado especialmente en los derechos de las mujeres y el derecho al aborto. Otros temas en su agenda incluyen la reforma del sistema de inmigración, la política climática y energética, y el fin de la violencia armada.