Las memorias de Britney Spears ya están a la venta, pero los efectos de sus confesiones están lejos de terminar. Y al parecer el gran victimario en esta pasada es el cantante y actor, Justin Timberlake, vinculado sentimentalmente a la cantante durante los primeros años de 2000.
Lo cierto es que a los fanáticos de la cantante (e incluso a los que no lo son tanto) no les cayó nada de bien enterarse de que Britney estuvo embarazada de JT. Pero que decidieron abortar porque él no quería ser padre a esa edad. Además, la cantante confiesa que Timberlake le fue infiel varias veces.
Y los fans no olvidan. A partir de dichas confesiones muchos recordaron que el ex integrante de N’Sync insistió en humillar públicamente a la cantante cuando terminaron su relación. Sin ir más lejos, Justin ostentó haberle quitado la virginidad y además la responsabilizó por la ruptura, luego de haberlo engañado con otro.
Lo que se sabe es que Justin Timberlake se encuentra “muy nervioso” y “preocupado” por el daño que le puedan producir a su carrera las confesiones de Britney Spears. Y es que según lo informado por la versión norteamericana de The Sun, la mayor preocupación del cantante es el recibimiento que le darán cuando justamente estaba preparando su regreso a la música luego de años de ausencia.
Fuentes cercanas al ex de Jessica Biel, y que también se involucró en una polémica en aquel Super Bowl cuando le destapó un pezón a Janet Jackson en pleno show, dicen que para disminuir los efectos de lo confesado por Britney, estaría analizando postergar un poco más su regreso a los escenarios, esperando que con el tiempo la gente se olvide de las revelaciones de Spears en este libro de memorias cuyos efectos siguen resonando.