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Si hay algo que destaca en las fiestas de fin de año, además del brillo y la celebración, es la comida y su forma de reunirnos con nuestros seres queridos. Sin embargo, también tiene su lado B y es importante tenerlo en consideración.
Muchas veces, las últimas semanas del año, con la Navidad y Año Nuevo, los excesos se vuelven algo muy típico. Sin embargo, no solo no es saludable, sino que además puede traernos incómodos problemas de digestión.
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Empezar el nuevo año evitando la indigestión y los problemas de hinchazón puede convertirse en una realidad. Sobre todo si comenzamos a alimentarnos de forma consciente, y siguiendo estos 9 útiles consejos que harán la diferencia.
La doctora María José Crispín, nutricionista de la Clínica Menorca, y Cristina Barrous, asesora nutricional, conversaron con Vogue España, y entregaron los mejores tips para disfrutar de este fin de año sin excesos, y sin culpas.
Todo con moderación
Muchas veces caemos en una mala relación con la comida y tendemos a crear una sección de ‘alimentos prohibidos’ que lo único que provoca es que el deseo de ingerirlos o reemplazarlos, sea incluso mayor que en un principio.
Para estas fiestas, no te prohibas comer nada, pero si, regula la ingesta de aquellos alimentos que en consciencia sabes que no son sanos, y modera su consumo. Una ayuda para concretar esto, es utilizar un plato más pequeño de lo normal cuando comamos.
Detectar el umbral de saciedad
Escuchar nuestro cuerpo es muy importante, sobre todo a la hora de sentarnos a comer. Desarrollar la capacidad de detectar nuestro umbral de saciedad es muy importante para no caer en los excesos, que nos llevan a la indigestión o hinchazón.
Según Barrous, cuando no escuchamos a nuestro cuerpo «no somos conscientes de cuánto necesita». Mientras que «cuanto más trabajamos la autoconciencia y la escucha, más comemos según nuestras necesidades».
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Masticar despacio
Otro tip muy sencillo para llevar a cabo, pero para el que debemos estar muy conscientes, es masticar más despacio de lo que solemos hacer. Esto, es esencial para dar tiempo a nuestro cuerpo a sentirse saciado, en lugar de seguir comiendo sin control más allá de lo que necesitamos.
Evitar (idealmente) las bebidas con gas
Si bien la idea es no restringirnos en cuanto a la alimentación estas últimas semanas del año. Si es importante ser conscientes cuales son las mejores opciones. Una bebida con gas no solo nos provoca hinchazón, sino también calorías vacías y altas cantidades de azúcar.
Cambiar el café por una infusión
Sobre todo en tiempos donde la sobremesa se extiende por más tiempo de lo normal, es típico que después de una comida nos sirvamos café con algo dulce. Sin embargo, es mucho mejor reemplazar el café por alguna infusión.
Ya sea una infusión comprada, o preparada por ti misma con ingredientes que potencien nuestra digestión, como lo son el jengibre, hinojo, y canela. Así como el poleo, menta, la manzanilla o el té verde.
Probióticos
«Incluir en nuestra dieta alimentos probióticos como el kéfir, el kimchi, la kombucha o el chucrut genera más bacterias buenas», explican las expertas. Incorporar estos alimentos también será de gran ayuda para mejorar la digestión, ya sea en los menús navideños o en el resto de comidas.
No saltarse comidas, escucha a tu cuerpo
Las tres comidas al día están grabadas en nuestra mente como algo inflexible. Incluso, pueden sumar más cuando se trata de días festivos. Sin embargo, lo importante es antes de hacerlo, escuchar nuestro cuerpo y concluir si en realidad comemos porque lo necesitamos, o porque creemos hacerlo.
Por otro lado, si estás pensando en saltarte alguna comida después de haber comido un gran banquete en la comida anterior, piénsalo bien. Esto puede ser contraproducente, ya que llegarás al banquete con más hambre, lo que te puede llevar a comer en exceso.
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Aprender a valorar las opciones saludables
Muchas veces tenemos la sensación de que las opciones saludables de comida no son tan ricas. Sin embargo, hoy existen muchas recetas de fácil acceso que pueden ser igualmente ricas, y que al mismo tiempo pueden ser más sanas, que deberíamos tener en consideración.
Comer sin culpa
Por último, y lo más importante para terminar y empezar el nuevo año, es soltar la culpa que nos genera en esta época el comer de más, así como también la presión de obligarnos a comer menos, o saltarnos comida. La idea es disfrutar de forma consciente y prudente con nuestro cuerpo y mente.
