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Gishlaine Maxwell ha sido sentenciada a 20 años en prisión por ayudar a Jeffrey Epstein en el abuso sexual de niñas adolescentes. Los crímenes cometidos por la mujer, ocurrieron entre 1994 y 2004.
Epstein fue encontrado inconsciente en el suelo de su celda en julio de 2019, con una sábana atada alrededor de su cuello, mientras esperar su juicio por tráfico sexual. El multimillonario se declaró no culpable y enfrentaba hasta 45 años en la cárcel. Casi tres años después de su suicidio, su socia y novia ha sido condenada.
Maxwell, de 60 años, catalogada como “lobo con piel de oveja” fue condenada en diciembre por reclutar y traficar a cuatro adolescentes para que Epstein abusara sexualmente de ellas. Y ahora la sentencia final fue decretada en dos décadas tras las rejas.
La jueza Alison J. Nathan dijo durante la sentencia, que la conducta de Gishlaine Maxwell fue “atroz y depredadora”.Y agregó, “Maxwell trabajó con Epstein para seleccionar víctimas jóvenes que eran vulnerables y desempeñó un papel fundamental en la facilitación del abuso sexual”.
Por lo mismo, afirmó que el caso requería una “sentencia muy significativa”, así como también un mensaje claro sobre aquellos delitos que serían castigados. Además de la pena de cárcel, se le impuso una multa de US$750.000, ante una inexpresiva acusada.
Antes de conocerse la sentencia, Maxwell se disculpó con las víctimas, asegurando comprenderlas y que haber conocido a Epstein había sido el peor error de su vida. “Mi asociación con Epstein me dejará una mancha permanente”, comentó. Y detalló que esperaba su sentencia para dar “paz y cierre” a las víctimas.
Gishlaine Maxwell ha estado bajo custodia desde su arresto en julio de 2020. Este caso, que involucra a la exsocialité británica ha sido uno de los más bullados desde el surgimiento del #MeToo.
Durante el juicio, fueron cuatro las mujeres que prestaron declaraciones en la audiencia de la sentencia. Todas con nombres y seudónimos para proteger sus vidas privadas, menos Sara Ransome. Y se leyó la de Virginia Giuffre, quien estaba ausente. Quien anteriormente divulgó su declaracón. “Para mí, y para muchas otras, nos abriste la puerta al infierno. Y entonces, Ghislaine, como un lobo con piel de cordero, utilizaste tu femineidad para traicionarnos y nos metiste a todas en esto”, decía parte de la publicación de Giuffre.
Annie Farmer, fue la primera en hablar. Luego, Sarah Ransome, quien no testificó en el juicio, declaró: “Ghislaine debe morir en prisión porque estuve en el infierno y regresé durante los últimos 17 años”. Y ella se refirió sobre otra de las víctimas, Elizabeth Stein.
“Yo tenía 10 años cuando Liz Stein estaba siendo traficada. Tenía 10 años. Ese es el tiempo que ha estado funcionando esta red de tráfico sexual. Y debería haber sido suficiente [la denuncia de] solo una sobreviviente para que se nos tome en serio. No debería haber sido tan difícil”, añadió Ransome.
Durante el juicio, Farmer y otras tres mujeres, testificaron que fueron abusadas cuando eran menores en las casas de Epstein en Florida, Nueva York, Nuevo México y las Islas Vírgenes. Y relataron cómo Maxwell las había convencido para que le dieran masajes a Epstein, lo que luego terminaba en algo sexual. Para atraerlas, utilizaba regalos, dinero y conexiones, además de promesas.
