Disecciona las relaciones sentimentales y eróticas de una generación aproblemada y cuyos modelos parecen derrumbarse. Aparece en todos los rankings de libros más leídos. Su novela más exitosa, Gente normal fue llevada a la televisión en una miniserie que estuvo nominada a Globos de Oro y al Emmy. Hija de padres socialistas y católicas, Sally es crítica del capital privado pese a que hoy es una escritora millonaria y superventas. Conversaciones entre amigos, la ya mencionada Gente normal y ahora con Donde estás, mundo bello está arrasando en todas las librerías del mundo incluidas las chilenas. Novelas que han conseguido enamorar a una generación pero también sentir una especial conexión con un espíritu de la época. Acá te contamos porqué tienes que leerla.
Esta carrera fulgurante comienza en 2017 con Conversaciones entre amigos, una novela sobre una veinteañera que se siente abrumada por el titubeante futuro y las titubeantes relaciones a su alrededor, en especial con su mejor amiga y con un enigmático treintañero hacia el que siente una irresistible atracción emocional y sexual. Editada con éxito por Penguin Random House, la por esos días veinteañera escritora se lanza por el que sería su hit literario más sonado: el drama romántico de Marianne y Connell, dos jóvenes que se conocen desde el instituto y que generan una conexión, imposible de categorizar, que los mantendrá unidos a lo largo de los años. La nombró Gente normal y se transformó en best seller mundial, tanto que la cadena Hulu la adaptó en imágenes transformándose en una exitosa miniserie aclamada por la crítica, llevándose muchos premios y nominaciones a cuestas. Con esta historia, Sally Rooney habló de temas políticos dentro de tanta intimidad: ahí estaba la idea de la falsa igualdad de oportunidades a partir de tu clase social, del amor más allá de la monogamia y de la salud mental. Una historia curiosa que refleja a una generación supuestamente experta en comunicación interpersonal pero con tremendas dificultades para expresarse y ser totalmente honestos entre ellos y consigo mismos.
Su ultima creación que la tiene en el primer lugar de las listas de los libros de ficción más vendidos es Dónde estás, mundo bello, un relato alrededor de dos amigas a poco de cumplir 30 años: Alice es una escritora de éxito que ha amasado una considerable fortuna en poco tiempo y Eileen es una redactora literaria precaria y sin grandes perspectivas de futuro. Un poco lo que fue ella y lo que es hoy. Entre las muchas entrevistas que ha dado, en una para El País de España se refiere a esos tiempos, cuando era menos reconocida y menos pudiente que hoy y cuando hacía una crítica al capital privado y que debería abolirse. La escritora tiene sus posturas: “Me hace feliz que mucha gente se interese por mis libros. Intento escribirlos lo mejor que puedo y me gusta que me paguen por hacerlo. Lo que no entiendo es por qué yo tengo que ganar mucho más que personas que realizan trabajos fundamentales para la sociedad, como mi marido, que es profesor de matemáticas, o los profesionales en primera línea de la pandemia. Es imposible imaginar dónde estaríamos si todos hubieran dejado de trabajar y hubieran decidido que iban a ser novelistas. No es que piense que no merezco ser recompensada por mi trabajo. Me pregunto si merezco multiplicar tanto el sueldo de los otros.
Hija de padres socialistas y católicos, dice que la novela romántica de estos tiempos es poco romántica: “trata de ser más verdadera que idealista”. En sus novelas hay temas recurrentes: las dificultades para comunicarse, la presencia (o ausencia) de un padre alcohólico, la bisexualidad de sus personajes. Ella no desmiente ni afirma cuánto hay de eso en su vida: “No estimo cuanto hay de mi en los libros que publico. No quiero decir que sean autobiográficos, pero tengo una vida y claro, en lo que escribo debe haber temas que me hayan hecho pensar o sentir. Escribo novelas porque creo en el poder de imaginar historias. Necesito que los protagonistas tengan una vida propia más allá de la que tengo yo”.
En la entrevista también afirma que una escritora podría estar emparejada con alguien que no lee: “Puede ser hasta saludable. Hay otras afinidades, las parejas no tienen porqué estar de acuerdo en todo”. Finalmente y a partir de su última novela superventas le preguntan, entonces ¿Dónde está ese mundo bello? Y Sally responde: “nos cuesta encontrarlo. La novela sugiere que en la experiencia estética que puede llegar del arte o de la naturaleza hay una ventanita abierta a la esperanza. Aunque puedas tener muchas dudas sobre la industria editorial, permite encontrar un libro que todavía puede cambiarte la vida”.