Tan solo dos días después de la entrevista de los duques de Sussex con Oprah Winfrey, Buckingham envía una sobria respuesta que quizás sea tan solo la primera.
Uno de los temas más polémicos de la entrevista fue definitivamente el tema racial en torno al pequeño Archie, el primogénito de Meghan y Harry. Y fue también el tema principal del comunicado oficial de la familia real.
“Toda la familia está entristecida al conocer lo difíciles que han sido los últimos años Harry y Meghan”, comienza el comunicado.
La corona británica no solo manifestó su preocupación por las denuncias de racismo hechas por los duques de Sussex, sino que además anunciaron que “que son tomados muy en serio” por los miembros de la familia y que serán serán abordados “en privado”.
El mensaje fue preciso y no aludió a algún otro aspecto de la entrevista. Solo dejar claro, una vez más que, “Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros muy amados de nuestra familia”.
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Recordemos que durante la entrevista Meghan aseguró que “Durante los meses que estuve embarazada hubo preocupaciones y conversaciones respecto a qué tan oscura sería su piel cuando naciera”, pero no dio nombres. Además, confesó que se discutió en varias oportunidades, más no con ella. Por su parte, Harry tampoco dio nombres porque no se sentía cómodo hablando del tema. “Esa es una conversación de la que nunca voy a hablar”, sentenció. Y agregó “ese fue un momento incómodo y quede impactado”.
Por su parte, Oprah Winfrey aclaró en CBS This Morning que ni la Reina Isabel II ni su marido, el Príncipe Felipe de Edimburgo, formaron parte de las conversaciones.