Luego de varios meses de cuarentena total, el desconfinamiento progresivo trajo consigo que poco a poco, ciertas empresas volvieran al trabajo presencial. Sin embargo, tras este periodo de home office y con el virus aún dando vueltas, es normal tener sentimientos encontrados sobre el regreso. Desde volver a despertarse más temprano, moverse por la ciudad y estar en contacto personas, a pensar en el almuerzo, las medidas de higiene y seguridad, entre otros.

Volver a la “normalidad” no es fácil. El ser humano es un animal de costumbre y, aunque lo creíamos difícil, estos meses de encierro bastaron para que de alguna, u otra forma, nos acomodáramos. Por lo mismo los expertos sugieren algunas recomendaciones si estás viviendo este escenario.

Desde Welcome to the Jungle, una plataforma laboral española, aseguran que “la vuelta a la normalidad requiere de grandes dosis de adaptación y de paciencia, no solo para procesar y aceptar los cambios, sino también con nosotros mismos”. Y si bien volver a la oficina debería ser algo revitalizante, los psicólogos advierten que el proceso que vivimos durante el encierro puede repetirse al salir de la casa.

No te adelantes

Los expertos aseguran que es normal tener pensamientos negativos sobre lo que pueda ocurrir. Pero, al mismo tiempo, afirman que, por lo general, suelen ser peores que el escenario real. Y sugieren recordar que lo que en su minuto vimos como un futuro desesperanzador, fue menos terrible de lo que anticipamos.

Proponte metas y planifícate

Una de las recomendaciones que más se hicieron durante el encierro, fue precisamente mantener horarios. Quizás hubo algunas modificaciones en el despertador, pero ahora que regresas a la rutina laboral, y los horarios son clave para volver al ritmo de antes. Al igual que proponerse metas, pero estas deben ser reales y plausibles a corto y mediano plazo. De esta forma te mantienes motivados a medida que vamos cumpliendo tus objetivos.

Habrá estrés, prepárate para superarlo

Es algo que no se puede negar, pero que sí se puede afrontar. La carga cambiara, los plazos también, y antes que la ansiedad y el estrés te jueguen una mala pasada, invierte tu tiempo de forma inteligente. Prioriza, analiza, planifícate, asegúrate de hacerte todas las preguntas necesarias, y de tener las respuestas. De esta forma reducirás los niveles de estrés.

Información sí, sobreinformación no

Ahora que estás de regreso lo más probable es que veas menos televisión y noticias. Los psicólogos coinciden en que estos es positivo, ya que está bien mantenerse informado. Sin embargo, exponerse a una sobreinformación no es recomendable.  En este caso, lo importante es estar al tanto de las medidas de la empresa u oficina donde trabajas, tu medio de transporte, los horarios, etc.

Crea una comunidad con tus compañeros

No eres el único que está de regreso. Piensa en lo bueno de tener a tus compañeros contigo de nuevo. Aprovecha este tiempo para fortalecer las relaciones de oficina.

Mantener la rutina de ejercicios

Ya sea correr, bicicleta o alguna clase por Zoom, o ejercicios de relajación, es clave mantenerlos en la rutina. Ayudan a la estabilidad emocional y y cortan el círculo vicioso de los pensamientos positivos.

Celebra los éxitos

Es un momento positivo que no solo reduce el estrés y la ansiedad, sino que además te mantiene positivo y motivado. No importa el grado, cualquiera sea el logro obtenido, debes darle su tiempo de celebración y reconocimiento.

Mantenerse inspirado

No porque haber vuelto a la oficina es el momento de olvidarse de los libros, videos, podcast o cursos online que estuviste mirando durante el encierro. Son la clave para seguir motivados en este nuevo proceso de vuelta a la oficina.