Poco a poco comenzamos a despedir el verano, pero nunca es tarde para aprovechar el aire libre y hacer algo de deporte. Correr en la ciudad puede ser algo monótono y si buscas lugares fuera de la ciudad, algunos de los embajadores de Columbia te revelan sus lugares preferidos.
La Araucanía inolvidable
Daniela Corvalán es bióloga y científica, y siempre ha sido deportista. Hace 9 años participó en su primera carrera en cerro y desde ahí no paró. Siempre que viaja busca cumbres en el lugar al que va. Para ella, uno de los lugares que más le ha gustado es Corralco, en la Reserva Nacional Malalcahuello.
“Uno se puede planificar con la pareja para ir para allá, en el auto, llevar un sándwich para compartir en el camino y los alojamientos están separados, hay privacidad y estás aislado y rodeado de naturaleza”. Hay una gran cantidad de trekkings y está a los pies del volcán Lonquimay. “Fui a correr una carrera con Max, mi pareja, y fue bien bonito. Estar en la entrada del parque y tener el volcán ahí mismo es precioso. Además puedes ir en verano o en invierno y tendrás una experiencia absolutamente distinta”, comenta Daniela. La deportista agrega que si vas a Corralco, “puedes ir a tomarte un vino o una cerveza al hotel, con vista al volcán, y rodeado de árboles y araucarias”.
El fotógrafo profesional y amante del mundo del trekking y la naturaleza, Cristián Aguirre, visitó el cerro San Sebastián en el Parque Nacional Huerquehue por primera vez en el año 2010, y cuenta que es una subida un poco intensa, pero que, a medida que subes “Pasas por todos los tipos de bosque de la zona hasta llegar al coirón, a la roca donde no hay nada. Es realmente maravilloso”. Desde la cima podrás ver la diversidad de los colores de la naturaleza, lagunas, ñirres, lengas, entre otros.
Roberta Irarrázaval comenzó a hacer snowboard a los 6 años y ha acumulado 9 oros nacionales y 7 sudamericanos. Con un estilo de vida único, fomenta la vida al aire libre y el deporte. El lugar que más recuerdos le trae es el volcán Villarrica. “Me gusta porque se puede hacer de muchas formas. Se puede ir en moto de nieve, se puede ir caminando, haciendo randonnée, se puede ir de diversas formas”, explica. a Roberta este lugar le trae muy buenos recuerdos: “sentarse en el volcán nevado, mirando hacia la puesta de sol que se pone naranja, con todos los lagos alrededor, Pucón, encuentro que realmente es una de las vistas más bonitas del mundo y donde uno aparte puede gozar todo el día y después te sientas cansado, a mirar hasta donde caminaste hacia los pies del cráter decir ‘no puedo creer dónde estoy’”.
Isidora Assler es amante del mundo outdoor y dos veces campeona nacional de Snowboard. Dentro de sus lugares favoritos para recorrer se encuentra un santuario natural llamado Salto Punta Negra. En la región de la Araucanía, entre Malalcahuello y Lonquimay, en el volcán Sierra Nevada se encuentra este trekking de aproximadamente 4 horas. Isidora comenta que se puede seguir hasta arriba a la laguna Espejo, donde está el glaciar del volcán. “Hace mucho calor y se forman pozones, uno se puede bañar ahí. Es demasiado energizante ese baño porque el agua viene directo de los deshielos”, agrega. Y asegura que es muy especial, “porque vas pasando por bosques de araucarias preciosos, unos colores espectaculares, bosques de lengas. Además esa zona tiene mucha energía, porque hay varios volcanes cerca, entonces ese lugar para mí es mágico y sagrado”.
Zona Central: mucho por descubrir e impresionar
Colomba von Unger es amante de la montaña, y eligió como su lugar favorito el Cerro Pintor, que queda al oriente de Santiago y el camino parte desde el centro de esquí la Parva. “Lo encuentro realmente mágico y accesible para todo el mundo. Un lugar donde se puede hacer trekking en el verano y subir randoneando durante el invierno. Con unas vistas coloridas increíbles que no dejan de sorprenderme cada vez que voy”, comenta.
Paula Cofré es ingeniera civil industrial. Practica trail running, montañismo, ciclismo de ruta y escalada. Su lugar favorito se encuentra en el Cajón del Maipo. Es un trekking bastante fácil de hacer, de una duración aproximada de 4 horas a la Laguna El Morado, comenzando desde el campamento Alto Maipo. “Es un lugar precioso que comienza pasando por el Valle Las Arenas, por una explanada de larga extensión y que va aumentando ligeramente su pendiente, el último kilómetro es el de mayor inclinación pero no representa ninguna dificultad”, cuenta. De ida son cerca de 8 km desde el camping. “Cuando llegas puedes disfrutar de la vista del Cerro El Morado, la laguna de gran extensión y un glaciar sobre ésta. Mejor aún si se va en invierno, nevado es más deslumbrante aún”.
El aire fresco de la costa
Para la periodista de Ecosport Natalia Pereda, uno de los lugares más mágicos queda en el pueblo de Los Molles. Ella ha ido a bucear en época de invierno y asegura una excelente visibilidad, lo que es poco común en la costa chilena. “Es uno de los pueblos más lindos que hay en Chile, es mágico, místico, la gente es muy buena onda y ahí mismo hay unas rocas al final del pueblo que se llaman Las Terrazas, en donde llegas a este mirador increíble en el que te puedes sentar y ves como el agua y las olas del mar revientan gigantes al lado tuyo y salpican agua”, cuenta Natalia.
Jorge Vera es preparador físico y ama el trail running, ganando hace poco los 50K en Huilo Huilo. Oriundo del sector de Zapallar, Jorge comparte uno de sus lugares preferidos: La Quebrada del Tigre. Tiene un ingreso por Cachagua por la entrada norte, se puede dejar el auto estacionado y el recorrido es relativamente fácil. También puedes subir en bicicleta, subes dos kilómetros y luego son cerca de 5 más de un sendero plano para una caminata tranquila por bosque nativo de la zona. “Tiene un sector donde algunos se tiran en lianas naturales de unas enredaderas. Para los que les gusta caminar más o los cerros por donde están las lianas se puede subir y conectar por el cordón del cerro y tendrá una vista del sector de papudo y conectar con el cerro el boldo”. agrega. Se puede volver por el mismo lugar o bien continuar y salir por la entrada sur de Cachagua.
Siempre hay que tomar medidas de seguridad cuando salimos a recorrer o a caminar. Avisar a alguien dónde vamos a estar, llevar ropa adecuada para el sol, el frío o el viento, una botella de agua, y algún snack.