Los tatuajes son dibujos o textos que se realiza sobre la piel inyectando tinta debajo de la epidermis. Una técnica, con variaciones, que representa alguna faceta de quien lo lleva, una época o estado de ánimo, es arte plasmada en la piel. Un arte que data desde hace miles de años. Es más, en las costas de Chile se encontró la evidencia más antigua de tatuajes en momias, perteneciente a la Cultura Chinchorro y con tatuajes que datan del año 2000 a. C.

Los tatuajes son arte que se imprime en el cuerpo, como un cuadro o una fotografía. Y en cada una de estas disciplinas la imagen, los detalles y el color, lo son todo. El fotógrafo profesional Matías Rojas combinó todos esos mundos, gracias a la integración del iPhone 15 Pro Max y el MacBook Pro M3, para retratar a una serie de personas y relatar cómo los tatuajes identifican.

Además, comparte sus consejos y trucos para lograr una imagen profesional, sacándole el provecho a esta cámara de bolsillo que promete elevar tu experiencia en la fotografía, a través del ecosistema Apple. Para ello, te invita a conocer la magia detrás de este proceso y de herramientas como Capure One, que pueden redefinir tu experiencia.

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¿Cómo puede el iPhone 15 Pro Max y el MacBook Pro M3 elevar tu experiencia visual?

7 lentes en un bolsillo

El iPhone 15 Pro Max tiene el sistema más potente de cámaras de Apple. Un upgrade a tal escala que es como llevar 7 lentes en el bolsillo. Un avance que Matías destaca. “Lo que más agradezco son sus 7 lentes, sus 48 megapixeles, y su rango dinámico. Con él, puedo dejar llevar mi creatividad y capturar la toma que estoy imaginando”, explica. Y sobre la diferencia con una cámara, agrega, “en muchas oportunidades me faltó algún lente o filtro. Con una cámara de fotos tradicional, si tomas una foto desenfocada, ya no hay opción de mejorarla. Con la opción Depth Control de este iPhone puedo controlar esas posibilidades, cambiando el foco a quien yo quiera”.

Tamaño, peso y versatilidad

Los fotógrafos suelen trabajar con muchos accesorios y el ecosistema de Apple trabaja en conjunto para facilitar y alivianar el proceso, con el resultado profesional que buscas. “Cuando viajo, tengo que llevar una maleta o mochila con todos mis lentes y cámaras”, comenta el fotógrafo, para quien la experiencia notablemente integrando este ecosistema a su trabajo. “Nunca había sentido que tenía tantos equipos en solo un dispositivo. Además de lo liviano, y de que esté todo en un dispositivo, hay muchos momentos que requieren de la inmediatez para tomar una foto perfecta, por lo que los 7 lentes integrados hacen magia”.

Conversación entre dispositivos

Una de las grandes ventajas de Apple es que los integrantes de su ecosistema conversan en tres sí y se potencian. Y para Matías, el poder compatibilizarlos es la principal ventaja. “Poder pasar de mi iPhone 15 Pro Max a mi MacBook Pro M3 Max en segundos. Y así también de la MacBook a mi iPad en un instante, es increíble”, comenta.

“Por otro lado, la MacBook Pro M3 Max tiene una autonomía ( hasta 22 horas) que para mí es fundamental, porque las sesiones no son siempre en estudios. En espacios abiertos, no tengo acceso a cargarla cuando lo necesito. Cuando estoy trabajando con mis distintos dispositivos puedo lograr que todos estén en la misma tarea en simultáneo, entregando a mi equipo una experiencia integral, cómoda y eficaz”, detalla. Además, el chip M3 de última generación, representa el salto más grande en arquitectura gráfica para los chips de Apple. Viene con Dynamic Caching que, a diferencia de los procesadores tradicionales, asigna el uso de memoria local en el hardware en tiempo real.

Capture One

Capture One es una herramienta permite conectar tu cámara para disparar directamente desde tu iPhone. “Es una herramienta muy útil, que todos los fotógrafos profesionales e incluso aficionados deberían conocer”, dice Matías. “Podemos hacer una sesión con nuestra cámara o iPhone conectada a MacBook y almacenar directamente las fotografías ahí, dándole un look en el momento con su panel de ajustes, creando un preset único para nuestras fotografías”, explica. Y agrega, “se complementa a la perfección, ya que puedo ocuparlo en mi MacBook, iPhone y iPad, creando mis propios ajustes para las fotos. También podemos conectar nuestra cámara al iPad, al iPhone y trabajar como si fuese la MacBook, almacenando y editando ahí mismo”.

Esta herramienta permite llevar a donde quieras la velocidad, la calidad de imagen, los colores alucinantes y las herramientas de colaboración de Capture One. Y todo le cabe en el bolsillo.

Formato ProRaw

Para Matías Rojas, lo mejor del iPhone 15 Pro Max “son definitivamente sus 7 lentes en tamaño bolsillo. Que puede tomar fotos de hasta 48 Megapixeles y el formato ProRaw que permite editar las fotografías”. ProRAW de Apple combina la información del formato RAW estándar con el procesamiento de imágenes del iPhone, ofreciendo controles creativos adicionales a la hora de realizar ajustes a la exposición, el color y el balance de blancos. “Y la pantalla acomoda mucho para ver todo lo que quiero con muchísimo detalle y brillo. Si tuviera que definirlo en una palabra, sería sublime”, sentencia.

No hay “malas fotos”

“La mayor frustración para un fotógrafo aficionado, profesional o una persona que quiere sacar una foto, es que no quede como uno quiere”, explica el fotógrafo. Sin embargo, con las nuevas funcionalidades del iPhone 15 Pro Max, una “mala foto”, tiene arreglo. “Ya nunca más se tendrán que lamentar porque quedó desenfocado, ya que puedes cambiar tu punto de enfoque una vez hecha la foto. Me ha pasado que mis amigos me dicen ‘mira esta foto estaba re buena pero me salió desenfocada’. Ahora eso ya no es problema, es posible modificarlo luego de haber hecho la foto”, explica.

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3 tips de un profesional a la hora de tomar fotos

Buscar buenos fondos. “A la mayoría les gusta sacar fotos en exterior, y la gracia de esas fotos son el entorno. Hay que buscar un buen fondo y luego posar a una persona en el encuadre”.

Buen encuadre. “Creo que muchas personas sacan fotos muy al límite de la cabeza y los pies. Y les recuerdo que siempre podemos cortar fotos. Pero una vez hecha la foto, no podemos recuperar aquello no capturamos. Por lo tanto, siempre le doy un poco más de aire a mis fotos para luego decidir si cierro el encuadre o la dejo así.

Edición. “Es igual de importante que tomar la fotografía. Una buena foto tiene un 50% de trabajo en la toma y el otro 50% es en post producción. Ahí tenemos nuestro sello, nuestros colores y nuestras cosas a destacar. Hay aplicaciones bien intuitivas, que no dan miedo al abrirlas y no es un mundo tan extraño. Hoy todos deberían poder manejas alguna aplicación de post producción”.