Para quienes son fanáticos de los hermanos Amell, bastará con decir que Robbie Amell es el protagonista. Sin embargo, si necesitas más motivos para darle una oportunidad a esta comedia de ciencia ficción, o mejor dicho, tecnológica, aquí te damos algunos extra.

Antes de comenzar, lo básico, Upload sigue la historia de Nathan (Robbie Amell), un informático que sufre un accidente en el año 2033. Con heridas mortales llega al hospital donde debe elegir entre morir o convertirse en un upload. Al tomar esta decisión, sobrevives en un mundo virtual…para siempre. Un lugar ficticio en el que todo, absolutamente todo, se digitaliza.

Por otro lado, está Nora, quien es agente de atención al cliente y es la encargada de guiar a Nathan en este nuevo mundo lejos de sus seres queridos, por lo que también se convierte en una especia de confidente.

Es inevitable pensar en la serie Black Mirror, pero en este caso la forma narrar la historia es diferente, y se basa precisamente en este nuevo concepto de ser humano y su ética. Es comedia si, pero para mostrar una realidad del futuro quizás muy probable.

Ahora, las razones para sumar esta serie a tu lista de ‘must’.

Hay más que Netflix. Con la cuarentena la plataforma de streaming se volvió un zapping infinito para encontrar algo nuevo. Y es que incluso en Internet encuentras algunas temporadas de serie antes de aparecer en Netflix, a menos que sea original de la marca. De esta forma Amazon abre un amplio menú con ofertas de entretención no disponibles en Netflix.

Su creador es Greg Daniels, el escritor, productor y director, quien destaca por su trabajo en televisión en exitosos shows como The Office, es razón suficiente. Daniels muestra un futuro con excesos tecnológicos que resultan incluso terroríficos, pero con su forma particular e ingeniosa de contar la historia…el resultado es genial.

El amor siempre estará presente. En este caso no solo se trata de conocer a las personas a través de apps como ya ocurre, sino que al existir la posibilidad de vivir eternamente, existen relaciones amorosas (y virtuales) entre vivos y muertos, o uploads.

Es más que una comedia. Para quienes ya la vieron, le suman a la comedia de ficción, el suspenso, romance, thriller, drama  y un guión muy bien cuidado.

La idea futurista viene del pasado. Según el propio Robbie Amell, Daniels tuvo la idea años atrás mientras escribía para Saturday Night Live. Y nadie consideró la idea hasta el éxito de The Good Place.

Robbie Amell. Lo decíamos al principio, y lo repetimos, un actor quizás no conocido por todos, pero con películas y series suficientes para seguir viéndolo en pantalla. Quien además, por estos días, protagoniza la película de ciencia-ficción, Code 8, junto a su hermano Stephen Amell, también disponible en Netflix.