Nueva e inesperada pelea en la industria cinematográfica. En medio de la espera de su nuevo film, Scarlett Johansson demandó a Disney. Esto, porque supuestamente no se ha respetado su acuerdo contractual para el lanzamiento de “Black Widow”.
La actriz que interpreta a Natasha Romanoff en la película de Marvel, llegó este jueves al Tribunal Superior de Los Ángeles para presentar su demanda por el lanzamiento de la cinta en cines al mismo tiempo que en Premier Access de Disney+.
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El motivo de su acción y la molestia radicaría en que la actriz obtendría un porcentaje de las ganancias que tuviera el film en las salas de cine. Lo que no ocurre en los lanzamientos de streaming, ya que sus ingresos se verán reducidos en millones de dólares.
La protagonista de la viuda negra reclamó que Marvel Studios, propiedad de Disney, le había prometido que la película sería un “estreno en salas de cine”. “Disney intencionadamente indujo el incumplimiento de contrato de Marvel, sin justificación, con el objetivo de impedir que Johansson obtuviera los beneficios totales de su acuerdo con Marvel”, explica en la demanda.
La acción legal no cayó nada de bien en la empresa de entretenimiento. Y, a través de un comunicado expuesto por Variety, tildaron la demanda de “triste y angustiosa por su insensible desprecio por los horribles y prolongados efectos globales de la pandemia de covid-19″. “No hay ningún mérito en esta presentación”, sentenciaron.
Como si no fuese suficiente, la compañía del ratón Mickey Mouse -que asegura haber respetado todos los acuerdos contractuales del caso- publicó las cifras respectivas a Johansson. Revelando el sueldo real que ha recibido la estrella de cine por dicha producción. Aseguraron que el lanzamiento de Black Widow en Disney+ “ha mejorado significativamente su capacidad para ganar una compensación adicional además de los 20 millones de dólares que ha recibido hasta la fecha”.
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En plena pandemia del covid-19, tiempos en que varios estudios de Hollywood optaron por evitar los lanzamientos en cines, la producción cinematográfica alcanzó un récord de taquilla, recaudando US$218 millones sólo en su primer fin de semana.