Los rumores de separación entre Alberto II de Mónaco y Charlène, no son nuevos. Y comienzan básicamente desde antes de su matrimonio en 2011. Cada cierto tiempo las revistas europeas titulan con una nueva polémica y desde la partida de la princesa a Sudáfrica, en ayuda de la preservación de los rinocerontes y otras causas benéficas en su país natal, no ha vuelto a la Costa Azul.
Desde hace tres meses que no se ven, en el inter tanto ella estuvo internada en la clínica por una infección y se perdió su décimo aniversario de matrimonio. Y ahora, la principal revista del corazón alemana, Bunte, insiste, en que el matrimonio pende de un hilo. ¿Cuál sería la razón? Un un tercer “hijo secreto” de Alberto. El que se uniría a los dos ya reconocidos, previos a su matrimonio con Charlène: Jazmin Grace Grimaldi (29) y Alexandre Grimaldi-Coste (18).
El primero de julio, con motivo de su aniversario, la princesa de Mónaco definió a su marido como “su roca”, y se filtraron videollamadas hablando con sus hijos desde Sudáfrica, pidiendo que la familia real la visitara y se fueran de safari. Sin embargo, ninguna de esas declaraciones apagó los rumores. Mucho menos cuando explicó la razón médica por la que no volvía a Mónaco con su familia.
“Lo que ha sido extremadamente difícil es que me dijo el equipo médico que no podía volver para mi décimo aniversario de boda. Alberto es el principal pilar de mi vida y mi fuerza, sin su amor y apoyo no habría podido superar este momento tan doloroso”, reconoció en ese momento.
Ante los últimos acontecimientos, la revista alemana no duda en asegura que el divorcio es inevitable y que una de las causas de esa separación podría estar en la última demanda de paternidad contra el príncipe que se interpuso en Italia el año pasado. La cual se debió haber resuelto en febrero, pero no se ha sabido nada.
Recordemos que fue en diciembre de 2020, justo cuando Charlène de Mónaco decidió raparse la cabeza, que el Daily Mail destapó un escándalo en la corte. Una mujer brasileña, que vivía en Italia, presentaría una demanda de paternidad contra Alberto de Mónaco asegurando que su hija de 15 años era una Grimaldi.
Incluso, se llegó a decir que esta supuesta nueva “hija secreta” ya se había puesto en contacto con Alberto, y que había sido concebida cuando Charlène y él eran pareja, ya que se conocieron en 2000, y esta nueva integrante Grimaldi nació en 2005.
Se exigió una prueba de ADN, el fallo estaba fechado para febrero de este año, pero hasta el día de hoy nadie de la Familia Real monegasca se ha manifestado al respecto. Es más, no se ha vuelto a tocar el tema.
Por lo mismo, ahora Bunte asegura que este tema puede haber afectado a la relación de Charlène con su marido. Y es más, desde antes de la estadía involuntaria de la princesa en Sudáfrica, por culpa de la enfermedad, no se les había visto juntos desde enero.
Recordemos que la exnadadora intentó huir del matrimonio, y durante la ceremonia lloró públicamente. Y según cuentan, fue precisamente por este rumor de un tercer “hijo secreto”, fruto de una relación del príncipe con otra mujer en los tiempos en que comenzaban su noviazgo.