“Nunca me gustó mucho el modelaje, entonces siento que no le saqué todo el provecho, pero no me arrepiento. No podía con esa presión, me hacían sentir gorda todo el tiempo”, dijo Pin Montané en “El Aperitivo”, el programa que Jordi Castell conduce, de lunes a sábado a las 19 horas, en el IG Live de @Revista_Velvet. La ex modelo y actriz también contó que, en esos años, a veces le tocaba viajar y sólo le permitían comer pollo con ensaladas y ella se preguntaba ‘¡¡dónde están mis chocapic!!’.

También aclaró que no siempre le agrada le digan que es tan linda. “Es tan físico y superficial, a veces me gusta, pero creo que hay cosas más interesantes que solamente un envoltorio, entonces tampoco le presto tanta atención a eso”, explicó.

Además, dijo que le costó bastante tiempo entender que las personas famosas no siempre son lo que aparentan; “la gente de la TV es tan cínica. Me costó mucho entenderlo, porque yo le compraba todo a todos, porque todos son ‘encantadores’, ‘amorosos’.  Me costó muchos años cachar la onda de la TV. Para mí las amistades están en los equipos completos, no por ser actriz me voy a relacionar sólo con actores. Al contrario, me relaciono mucho más con los camarógrafos y los sonidistas, y con el director de piso”. Y contó que le han sugerido sobresalir haciendo ruido mediático; “a mí me han dicho ‘Pin yo te veo a ti como sin gusto a nada, te falta ser más perra’ y yo contesto ‘no, yo nunca voy a ser más perra”.

Sobre la cuarentena, confesó que le cuesta ver todos los días sólo tres caras -la de su pareja y sus dos hijas- y que lo más indigno que ha hecho en este tiempo de encierro es no ducharse en tres días.